Opinión

Ilusionar al barcelonismo

Joan Laporta en la entrevista con Barça One

Joan Laporta en la entrevista con Barça One / Barça One

Viajo a menudo por toda la geografía acompañando al equipo en los partidos y me muevo por los ambientes futbolísticos de muchas zonas de Catalunya y de España y tengo la suerte de pulsar el termómetro de la ilusión del barcelonismo en cada momento. Y no nos podemos engañar, los ánimos están algo bajos y la moral, tocada. La fiel infantería barcelonista, incondicional del club en los buenos y sobre todo, en los malos momentos, necesita un golpe de esperanza, un empuje de ilusión para levantar el actual estado de ánimo.

Son tiempos difíciles para ejercer el barcelonismo. La suerte del club es que se es del Barcelona en las duras y en las maduras y, si cabe, uno hace más fuerte su sentimiento barcelonista en momentos difíciles, en transiciones como la que está viviendo el club tras la salida de Messi y la delicada situación económica que le estrangula desde hace algunos años. Es muy fácil subirse al caballo ganador. Mucho. El mérito es mantenerse cuando las perspectivas de ganar no son las más claras.

Es responsabilidad del presidente y su junta la de ofrecer un proyecto lo suficientemente ilusionante como para puedan sentirse orgullosos de su club. Es ya obligación de la directiva a estas alturas, conseguir el Fair Play financiero suficiente para poner en manos del entrenador las armas necesarias como para poder triunfar. Lo contrario será una enorme decepción en la recta final del mandato de Laporta.

Flick representa parte de la esperanza que el culé tiene depositada en que van a comenzar a cambiar las tornas. Es aire nuevo, brisa fresca para la entidad. Pero hace falta algo más. Ilusión en una nueva temporada que permita olvidar el amargo sabor que nos ha dejado la campaña que terminó. Un golpe de efecto que le diga al mundo del fútbol que el Barcelona está muy vivo y que su proyecto será muy competitivo. Ya sea en cuanto a nombres como en cuanto a proyecto real o a ideas a ejecutar.

La cantera, los jóvenes son ilusión pero hay que arroparles para no desgastar una camada brillante de jóvenes talentos llamados a escribir en el futuro grandes páginas de gloria deportiva para el Barcelona. Pensar que solo la cantera a corto plazo va a dar resultados es muy peligroso y contraproducente. En el Barcelona se exigen resultados cada temporada y no hay años de transición que valgan.

Es hora de darles una alegría a esos incondicionales seguidores que tanto llevan sufriendo y lamentándose por su Barcelona últimamente. El futuro no parece, a corto plazo, el más alentador, y a pesar de ello, su fe inquebrantable en el Barcelona les hará seguir animando y empujando desde cada rincón con toda la fuerza posible. Ese debe ser el objetivo. Se lo merecen; son los que dan sentido al Barça, no lo olvidemos.