Adiós al Red Fish: Derriban en Barcelona uno de los chiringuitos más emblemáticos

Uno de los establecimientos más emblemáticos de la zona de la playa de Barcelona ha conocido hoy su fin a manos de las excavadoras y demás máquinas que lo han demolido.

Este ha sido el resultado final de una prolongada batalla legal, que ha concluido con un acuerdo municipal que permitiría continuar operativo al club de patín de vela. Sin embargo, en el mismo acuerdo se exigía la eliminación del chiringuito que ocupaba una gran zona a pie de mar.

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Esta decisión ha sido criticada y opuesta por el Gremi de Restauració de Barcelona quienes, desde el inicio del litigio abogaron por el mantenimiento del espacio debido a su importancia para los habitantes de Barcelona. Frente a la decisión final de derrumbar el establecimiento Roger Pallarols, el presidente del Gremi, ha señalado lo siguiente: "Hoy nadie gana nada. Barcelona, menos".

La realidad es que, pese a que al titular de la actividad de restauración se le continuará permitiendo que preste ese servicio en el espacio interior del edificio, este ya ha señalado que no cree que el negocio siga siendo viable de esta manera. Y es que, la zona interior es de unos 90 metros cuadrados, algo que palidece frente al espacio exterior del que disponían anteriormente y que ha quedado destruido hoy.

Dicho esto, el ayuntamiento ha señalado que el propósito de este acuerdo era "garantizar la actividad de esta asociación sin ánimo de lucro permitirá legalizar su situación y mantener las actividades que realiza de promoción y difusión de la navegación con la embarcación de patín de vela".

En conclusión, el acuerdo ha generado bastantes críticas, pero ha sido la única solución viable a la que se ha podido llegar finalmente.