La nueva mirada de Hansi Flick

Flick elogia a los aficionados del Barça

Día importante para Hansi Flick. Hoy el nuevo entrenador del Barcelona va a vivir su primer cara a cara con el periodismo, más de un centenar de medios acreditados con ganas de trasladar a la afición los mensajes de su técnico ante una temporada que empezó sin mucha tensión pero que poco a poco, con la explosión de Lamine en la Eurocopa y la posible llegada de Nico Williams, está generando ilusión. Cuentan de Flick que acostumbra a liquidar rápido sus apariciones ante la prensa. Hoy va a necesitar paciencia.

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El entrenador ya habló esta semana ante los medios del club y dejó algunas frases interesantes. Al ex del Bayern y de la selección alemana le gusta el fútbol ofensivo, lo más vertical y directo posible en la búsqueda de la portería rival y con más pases hacia delante que hacia atrás. Está bien. De hecho, jugar de manera ofensiva forma parte de la historia del club. Además, con la llegada de Johan Cruyff al banquillo azulgrana en 1988, el club construyó un tesoro en forma de método futbolístico que Pep Guardiola llevó a la excelencia, que le ha dado al Barça la mayor racha de títulos, las cinco Champions y un orgullo de pertenencia admirado por todo el mundo. Jugar al ataque casa con los gustos del barcelonismo.

Sin embargo, la peor versión del método cruyffista nos ha traído esta nueva realidad, con Hansi Flick y sus matices. Paciencia antes del análisis: habrá que ver lo que sucede en el terreno de juego para observar, más allá de las esencias, las soluciones del técnico alemán, por ejemplo, ante los habituales problemas de los azulgranas contra equipos cerrados. Como todos sus predecesores va a necesitar de dos conceptos básicos. El primero es la amplitud y por eso el técnico alemán quiere a jugadores especialistas en el juego por fuera. Tiene a Lamine y a Raphinha, y quiere a Nico Williams para buscar el uno contra uno que acerque el balón lo más rápidamente posible a la portería rival. El segundo concepto es la profundidad, que se gana por fuera con los extremos y por dentro, con los desmarques profundos del 9 y de los interiores para recibir el balón o para generar un espacio que debe aprovechar un compañero. Lamentablemente, esta segunda necesidad se ha echado tanto en falta en los últimos tiempos que ha comportado un fútbol aburrido y horizontal que ha sido bautizado despectivamente como 'tiki-taka'.

Hay ganas de Barça, de ver como acaba el verano en materia de entradas y salidas, que hace Hansi Flick con esta plantilla y cómo hace frente al Real Madrid de Mbappé. De observar la nueva realidad después de tantos años de éxitos y de un triste final de etapa. Hoy habla el entrenador y hay que estar atentos.