El fichaje de Hancko solo se podría hacer realidad con una importante salida

El Atlético de Madrid está muy cerca de cerrar su plantilla para la temporada que viene. Sin ir más lejos, hoy se ha hecho oficial la llegada de Lenglet, cedido por el Barça hasta 2025, para reforzar la posición del central izquierdo. Una posición que finalmente no ha podido ocupar David Hancko. El eslovaco llevaba meses siendo el gran objetivo de los colchoneros para cubrir la marcha de Mario Hermoso, pero el límite salarial va a impedir que se produzca esta operación.

Con Lenglet, Simeone ya tiene a su central zurdo

La llegada del central francés, en calidad de cedido, se explica en la imposibilidad de poder meter a Hancko su límite salarial. El Atlético, con 300 millones de euros como límite, solo le quedaban libres unos 1,5 millones. Por lo tanto, no había espacio para inscribir al defensa del Feyenoord, ya que entre amortización y salario del jugador, los rojiblancos necesitaban un espacio de 13 millones.

Una operación 'frustrada' que solo se podría realizar mediante una última opción: la de dar salida a jugadores con fichas muy elevadas como podrían ser la de Jan Oblak, cuestionado en los últimos días por su mal estado de forma, o la de Ángel Correa. Aunque sus salidas no están nada avanzadas.

LA PREMIER PASA A LA ACCIÓN

A falta de 5 días para el cierre del mercado estival, el Manchester United sigue buscando el fichaje de un central experimentado para solucionar sus problemas defensivos: la grave lesión de Leny Yoro y la venta de Willy Kambwala al Villarreal. De esta forma, los 'Red Devils' se habrían fijado en Hancko, gran deseo de los colchoneros.

Según informan desde Países Bajos e Inglaterra, el United estaría dispuesto a llegar hasta los 40 millones que pide el Feyenoord. Aunque todo puede pasar en un mercado de fichajes. Ya veremos como acaba todo este culebrón.

Lo único que está claro, es que, de momento, el Atlético de Madrid solo está centrado en las operaciones que tiene por la mano: dar salida a los jugadores que no entran en sus planes (Vermeeren, Galán o Mouriño), inscribir a Lenglet y hacer oficial la llegada de Juan Musso, el guardameta del Atalanta que llega al Metropolitano para hacerle la competencia a Oblak.