Opinión

La herencia de Xavi es enorme

Flick está construyendo su equipo a partir del trabajo iniciado por el egarense

Araujo, Pedri y Xavi, durante un partido la pasada temporada

Araujo, Pedri y Xavi, durante un partido la pasada temporada / JAVI FERRÁNDIZ

Para justificar que meses atrás dijeran digo y más adelante soltaran la bomba diciendo Diego, se hartaron de echar heces sobre el trabajo de Xavi. Es el habitual modus operandi de quien debe justificarse ante un cambio de opinión tan brusco y, valga la redundancia, injustificable. El siguiente paso que marca el protocolo argumental se está ejecutando esta temporada, aprovechando que el viento sopla a favor gracias al extraordinario arranque de quien sustituyó a Xavi, Hansi Flick, a quien están usando para exhibir facturas pendientes contra su predecesor.

Hay que tener poca clase para mandar recaditos del tipo “Flick no busca excusas y se arregla con lo que tiene” o “en el club trabajamos muchísimo más que antes”. Porque una cosa es ensalzar el trabajo que está realizando el alemán y, otra muy diferente, acordarse del que hizo Xavi en las dos temporadas y media que estuvo al mando del proyecto. Es gratuito y tremendamente injusto cargar contra quien agarró a un equipo que navegaba a la deriva y al que dejaron sin Messi de un día para el otro (también Xavi se arregló con lo que había, como Koeman), como también es incomprensible que alguien como Pedri, para quien su ex entrenador solo tuvo palabras de elogio y cariño durante los muchos meses que estuvo lesionado, realice la comparación que realizó en ‘Mundo Deportivo’. 

Hansi Flick y Carlo Ancelotti conversan antes del clásico Barça-Madrid de la pretemporada 2024/25

Hansi Flick y Carlo Ancelotti conversan antes del clásico Barça-Madrid de la pretemporada 2024/25 / VALENTÍ ENRICH

Quedarse con todo aquello que había que mejorar (alguna responsabilidad deben tener también jugadores que ahora parecen aviones cuando la pasada temporada parecían tractores) y borrar todo lo que se hizo bien no es solo ir en contra de Xavi, sino también una manipulación burda que no supera el más mínimo control de calidad. Sentencian que Flick ha sabido obtener mucho más rendimiento de una plantilla que solo se ha reforzado con Olmo (y Pau Víctor). Si eso es así, están elogiando, seguramente sin intención alguna, el trabajo de Xavi, que fue quien dio la alternativa a Cubarsí o a Lamine Yamal, pero también colocó a Koundé en el lateral o a Raphinha en esa posición a medio camino entre el extremo zurdo y el centro del campo en la que brilla como nunca de blaugrana.

Xavi Hernández y el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, anuncian el nuevo acuerdo para que Xavi sea el entrenador del primer equipo para la próxima temporada.

Xavi Hernández y el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, anuncian el nuevo acuerdo para que Xavi sea el entrenador del primer equipo para la próxima temporada. / Jordi Cotrina

Fue Xavi quien devolvió la mentalidad ganadora a un equipo que fue campeón de Liga y que la pasada temporada estuvo cerca de las semifinales de la Champions. Si hoy el Barça ha arrancado como una moto es, en gran medida, porque Flick ha entendido que había que aprovechar todo aquello positivo que le dejó Xavi en herencia y, a partir de ahí, realizar los cambios necesarios para poner su sello a un proyecto que tenía y tiene muy buena pinta, pero que, de momento no ha ganado nada porque sigue en construcción, como lo estaría cualquier equipo al que su presidente solo exige "trabajo y profesionalidad", demandas que para Xavi debía venir de serie.