Los calcetines de Carlos Ortega, el último mohicano del Barça

La apuesta que realizó la Junta de Joan Laporta por Carlos Ortega en el verano de 2021 ha resultado completamente ganadora pese a que las formas con Xavi Pascual y con David Barrufet no fueron ni mucho menos las correctas.

Desde el primer día, el técnico malagueño tuvo que hacer frente a críticas que no correspondían a su trabajo y muchos pagaron con él la frustración por el citado relevo en el banquillo sin recordar que había sido un mito de la sección, de esos que se partían la cara cada vez que se enfundaban la zamarra azul y grana.

¡Un Barça irreductible conquista la 'Duodécima' Champions en Colonia!

La primera temporada le costó hacerse con el equipo y sufrió con la derrota en la Super Globe y con algún partido malo en Europa. Sin embargo, el andaluz no se rindió y se pertrechó con su staff junto a Tomas Svensson para hacerse más fuerte e ir fortaleciendo un grupo que acabó conquistando la 'Undécima' Champions en Colonia en una dramática tanda de penaltis contra el Kielce. "Tuve que soportar mucho y la verdad es que fueron semanas muy duras", llegó a admitir antes de que al año cambiase su último dígito.

La pasada temporada se escapó el título en los penaltis en una semifinal ante la 'bestia negra' Magdeburgo y el pasado verano volvieron las curvas dos años después con la tormentosa marcha de Fàbregas, la rescisión a Cindric y la grave lesión de Makuc. Ya contó en ese segundo curso con otra gran ayuda en el staff, Konstantin Igropulo.

Se habló de temporada de transición, de proyecto más modesto... pero todo eso son gaitas para Ortega. El malagueño es un ganador nato y se puso a trabajar tras ver cómo por 'Ludo' (el mejor pivote del mundo) llegaban dos veinteañeros: Javi Rodríguez y Jaime Gallego.

Además, a medida que transcurría la temporada iba cobrando fuerza un rumor convertido finalmente en noticia: Carlos Ortega sería el único entrenador del mundo profesional del club que seguiría en su cargo tras la marcha por diversas circunstancias de Xavi Hernández (fútbol masculino), Jonatan Giráldez (fútbol femenino), Roger Grimau (baloncesto), Jesús Velasco (fútbol sala) y Edu Castro (hockey patines).

En analogía con la mítica película de Michael Mann, el 'último mohicano' azulgrana ha convertido en un pivote de garantías a Javi Rodríguez, se ha 'inventado' a Melvyn Richardson como central, ha creado otro 'centro defensivo' espectacular con Frade como 'escudero' de Petrus y de Carlsbogard, ha sabido contentar a dos porterazos como Nielsen y Pérez de Vargas.

"El Barça es el Barça y tenemos que aspirar a todo. De hecho, estamos capacitados para ello", ha repetido el técnico más de una vez a SPORT incluso en los malos momentos. Así que ya saben, si tienen que darle la vuelta a los calcetines antes de una boda... ¡llamen a Carlos Ortega!