El Barça quiere la pelota

El Barça presenta la nueva equipación del equipo para la temporada 24/25

Cuando en noviembre pasado se dio a conocer el ‘claim’ del 125 aniversario del FCBarcelona, ‘Volem la pilota’, fui profundamente crítico con el mismo por incompleto y reduccionista. Esa frase no podía explicar todo lo que representa el club, su historia, su tradición y su profunda vinculación a Catalunya. Lo que sí es cierto que explica muy bien lo que ha sido el Barça tras el legado de Cruyff dentro del campo. Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Pues lo que un contenido audiovisual expresa, no lo resumirá nunca una imagen.

Esta semana se ha dado a conocer una pieza audiovisual para el lanzamiento de la nueva camiseta, que en verdad es mucho más que eso, porque es un chorro de emoción para la resonancia de la marca blaugrana. La pieza bebe de las mejores campañas de publicidad de Nike, que ha creado multitud de piezas antológicas en el mundo del fútbol, por favor degusten, si no la han visto, la del Mundial de Sudáfrica; pero también lo hace de los mejores anuncios con los que la propia Nike o Estrella Damm se han vinculado al equipo culé hace años. Rezuma un presupuesto ajustado, pero demuestra una gran voluntad de producir con detalle y cariño. Por tanto al Barça y a la agencia que está detrás, si como dicen es ‘White Horse’, deben ser felicitados. 

La pieza esta trufada de pequeños detalles, dotada de una narrativa efectiva, rápida y versátil, que te obliga a verla en repetidas ocasiones para recuperar detalles que tu retina ha visto, pero tu cerebro no ha procesado. Cada repaso te ofrece un nuevo guiño. Una campaña es un concepto pero también es una ejecución. Una buena idea mal ejecutada nunca trascenderá, pero cuando con una buena creatividad se ejecuta excelentemente, la idea se transmite de forma sublime. Corte a corte, que se suceden con ventanas cortas de segundos, dándole el ritmo casi perfecto.

Construir el ‘Volem la pilota’ a través de la historia reciente del barcelonismo, usando a sus icónicos protagonistas (Ronaldinho, Iniesta, Puyol y Piqué) que obtienen la atención del espectador, a la que se añaden los imberbes pero ya suficientemente simbólicos pibes actuales (Lamine, Pedri, Gavi o Fermín) obtienen una combinación perfecta de legado con actualidad. Messi retorna en una narración radiofónica. No debía faltar Xavi, por mal que haya marchado del club. Sólo nos falta Guardiola, ¿por qué?. 

El link Brasil-Barça, la ‘manita’ de Piqué, la croqueta de Iniesta, denotan cultura y orgullo culé que ambientan la construcción del guión, a los que se suma el entorno cultural y simbológico de la cultura catalana con un formato suficientemente expresivo sin que nadie pueda sentirse excluido. El detalle, que retiene en el tiempo la película por unos segundos, de una Pilarín Bayés fuera de contexto con la fusión del “jugar maco” con el “jogo bonito” rompe voluntariamente la pieza en dos y la saca del contexto para introducirnos al mayor activo actual: el femenino y su construcción de equipo. 

El vídeo, sin duda, ha sido lo más refrescante y constructivo para la imagen del Barça a nivel global que se ha hecho en los últimos años. Así se construyen las marcas, más aún, cuando los títulos y el juego no acompañan. Alguien decía en otra pieza audiovisual mítica: “Que n’apreguin”. Pues eso, así, sí. Cuando se debe criticar, se critica, cuando se hacen las cosas bien, se loa.