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Pesic no se arruga ante Estados Unidos en busca de la gran final

El veterano técnico serbio cree que el conjunto estadounidense “es el mejor equipo en la historia del baloncesto” por encima del Dream Team, aunque Serbia también quiere luchar por el oro

Pesic respeta mucho a Estados Unidos pero cree que tienen sus opciones de pasar a la final

Pesic respeta mucho a Estados Unidos pero cree que tienen sus opciones de pasar a la final / FIBA

Ramon Palomar

Ramon Palomar

Serbia se medirá por segunda vez en estos Juegos Olímpicos a Estados Unidos, -cayó en la fase de grupos por 84-110-aunque ahora será por una plaza en la gran final del torneo olímpico, a partir de las 21.00 horas de este jueves, en el Bercy Arena.

El técnico de Serbia, Svetislav Pesic, solo tuvo palabras de admiración para el conjunto estadounidense, aunque no piensa a renunciar a luchar por la victoria en su objetivo de luchar por el oro olímpico.

“Vamos a medirnos a un equipo excepcional, puedo decir sin equivocarme que es el mejor equipo nacional en la historia del baloncesto”, dijo Pesic, que incluso considera superior al Dream Team que compitió en Barcelona’92.

"No vamos con miedo"

Cree que el conjunto norteamericano “ha ido creciendo a lo largo del torneo, aunque nosotros creemos en nuestro juego y no vamos a tenerles miedo”, decía Pesic. "Nosotros ya estamos entre los cuatro mejores equipos de los Juegos lo cual es todo un éxito, pero hay que mirar hacia adelante", aseguró.

Pesic observa una jugada del encuentro de la primera fase donde Estados Unidos se impuso por 84-110

Pesic observa una jugada del encuentro de la primera fase donde Estados Unidos se impuso por 84-110 / FIBA

“Queremos jugar un buen encuentro y por eso el día previo no entrenamos y nos quedamos en el hotel, después de un encuentro duro y tenso como el que vivimos ante Australia”, comentó el tecnico, que tiene la duda de Nikola Jovic..

“Sabemos exactamente a quién nos enfrentamos aunque ellos también se medirán a un equipo que viene también a buscar el oro olímpico”, fueros las palabras desafiantes de Pesic.