La teoría de la involución de Darwin en Liverpool

La participación de Darwin Núñez en este comienzo de la Premier League ha quedado restringido a apenas 32 minutos. El uruguayo disputó dieciocho minutos contra el Brentford y catorce frente al Manchester United. Sin una sola titularidad y sin la posibilidad de brillar en este parón internacional. ¿Qué ocurre con Darwin?

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El delantero no estará con Uruguay en esta fecha internacional por la sanción de cinco partidos que le cayó por participar en una pelea durante la Copa América, aparte de la multa económica de 20.000 dólares. Darwin se quedará en Liverpool a las órdenes de Arne Slot y quizás es su mejor oportunidad para ganarse la confianza del técnico holandés, que desde su llegada a Anfield ha preferido optar por Diogo Jota.

El portugués, autor de un tanto en la jornada inicial contra el Ipswich Town, ha sido titular en los tres primeros partidos de Premier. La campaña pasada estuvo en el once inicial en catorce ocasiones.

El 'protegido' de Klopp

Sin embargo, Darwin, con Jürgen Klopp, era el favorito, con 22 titularidades solo en liga. Tras una primera temporada de adaptación, los números del uruguayo mejoraron el curso pasado, aportando 18 goles y 13 asistencias. Aun así, Darwin fue el tercer jugador con peor xG (Goles Esperados, estadística que mide cómo de probable es que un disparo acabe en gol) de la Premier. Según la métrica, debería haber marcado 16 goles, pero solo hizo once. Solo Dominic Calvert Lewin, con un xG negativo de 5,8, y Brennan Johnson, con -5,3xG, empeoraron sus números.

Si se extiende esta estadística a los delanteros que ha fichado el Liverpool desde Roberto Firmino en 2015, Darwin es el que peor ratio ofrece de todos, pero en Anfield también se ha valorado su entrega, sus asistencias y su carácter. Por eso sorprende su caída del once titular y su descenso a un rol de suplente.

Los resultados, además, acompañan la decisión de Slot, porque el Liverpool es el único equipo de la liga que ha ganado sus tres partidos sin encajar un gol.

Con cierta sensación de tapados, tras dos años en que han llegado a la pelea final Manchester City y Arsenal, el Liverpool, sin grandes refuerzos en verano más allá del de Federico Chiesa, aspira a continuar la etapa de Klopp con más éxitos, pero el papel de Darwin en ellos en estos momentos parece en entredicho.