Receta

Este es el postre más antiguo del que se tiene constancia: ¿Cuál es su receta?

Este postre es uno de los favoritos en la actualidad 

Las tartas de queso están de moda

Las tartas de queso están de moda / Pexels

Para muchas personas, terminar la comida o la cena con un postre es un ritual que no están dispuestos a perderse. Si echamos la vista atrás en la historia seguro que hay muchas personas que tampoco estaban dispuestas a perderse el postre.

¿Te habías preguntado cuál es el postre más antiguo del que se tiene constancia?

El postre más antiguo del que se tiene constancia es la tarta de queso. Su origen nos llega desde la Isla de Samos hace 4.000 años. Durante los primeros Juegos Olímpicos en Olimpia (776 a.C) la sirvieron como parte del menú de la competición.

Esta primitiva versión de la tarta de queso estaba hecha con queso, miel y harina. Los romanos adoptaron esta receta y la llevaron a Europa, donde cada región comenzó a desarrollar sus propias versiones y técnicas para preparar este delicioso postre.

Con el tiempo, la tarta de queso viajó a América, donde en Nueva York se perfeccionó una de sus variantes más famosas y reconocidas: la New York Cheesecake.

Ingredientes para hacer tarta de queso

  • 1 paquete de galletas tipo digestive
  • 100 gramos de mantequilla
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • 500 gramos de queso philadelphia o similar
  • 100 gramos de azúcar blanca
  • 500 ml de nata para montar (35% materia grasa)
  • 2 sobres de cuajada
  • 1 sobre de gelatina en polvo
  • 1 bote de mermelada de fresa o frambuesa

Receta tarta de queso

  1. Lo primero que haremos será coger las galletas y las trituraremos hasta hacerlas polvo. Yo he usado el triturador de la batidora pero podéis meterla en una bolsa y con la ayuda de un rodillo las dejaremos trituradas.
  2. Derretimos la mantequilla en el microondas y mezclamos las galletas trituradas con la mantequilla y un toque de esencia de vainilla.
  3. Ponemos en un molde el fondo de papel vegetal y hacemos la base de la tarta. Con la ayuda de un espalmador o con la mano presionamos bien. Metemos en la nevera durante 15 o 20 minutos.
  4. En una cacerola ponemos la nata a cocer junto con el queso philadelphia, los sobres de cuajada y el azúcar. Dejamos cocer a fuego lento 1 minuto para que la cuajada actúe. Si no cocemos puede que la cuajada no funcione. Una vez que está todo el queso derretido y mezclado con los demás ingredientes, lo vertemos encima de la base de galletas. Introducimos en la nevera mínimo 4 horas.
  5. Pasado ese tiempo ponemos en una cacerola la mermelada de fresa con un chorrito de agua y el sobre de gelatina. Cocemos a fuego lento un minuto y retiramos. Dejamos enfriar un poco (con cuidado de que no se cuaje la mezcla) una vez templado y que continúe líquido lo vertemos encima de la base de queso y volvemos a introducir en la nevera durante un par de horas. Lo dejo enfriar un poco porque una vez lo puse directamente de la cacerola y se derritió por completo la base de queso jeje. Así que esperad unos minutos.