La venta del Barça era Araujo

La dirección deportiva del club estaba dispuesta a traspasar al central si el United pagaba una cifra astronómica

Laporta era reticente, pero la lesión ha acabado por frustrar su salida. Ahora, apretarán para renovarle

¡Araujo se lesionó frente a Brasil!

Araujo se lesionó en el partido de cuartos de final de la Copa América ante Brasil / Twitter

L. Miguelsanz

L. Miguelsanz

En el Barça aseguran que tienen la fórmula mágica para fichar sin vender a nadie de peso en el primer equipo. Y que así podrá venir, al menos, Nico Williams aunque lo de Dani Olmo puede quedar más en el aire. Las cuentas no acaban de cuadrar, entre otras cosas, porque el área deportiva tenía en mente validar la salida de algún jugador importante este verano para generar espacio salarial y conseguir ingresos suficientes con los que invertir.

Los tres grandes candidatos eran Raphinha, Frenkie de Jong y Araujo. Sobre todo Araujo. Las negociaciones para la renovación del central, que acaba contrato en el 2026, no iban bien encarriladas con el entorno del futbolista y en el Barça tenían claro que sus agentes estaban apostando a una venta favorable para todas las partes. Y en ese escenario, Deco tenía claro también que se debía vender a pesar de que aquí las posturas no convergían con el presidente, Joan Laporta. Laporta ha tenido un papel muy activo en la renovación de Araujo, convencido de que es un líder para el equipo y se ha mojado ante el jugador intentando forzar un acuerdo que, hasta ahora, ha sido imposible. Y el presidente iba a dar su brazo a torcer justo cuando el uruguayo se rompió en la Copa América y echó al traste cualquier operación.

El escenario llegó a estar muy caliente. Más de lo que se ha querido vender públicamente. Y lo estaba porque Deco no ha subido la oferta de renovación en ningún momento en un gesto que podría ser interpretado como una invitación a su marcha y porque el Manchester United irrumpió con una propuesta astronómica hacia el jugador...y hacia el club. El club inglés está reventando el mercado con una inversión de más de 250 millones de euros y estaba dispuesto a todo por Araujo, pero su reciente operación lo ha roto todo.

Ahora, el Barça va a intentar reconducir la renovación con Araujo como pueda porque no quieren que entre en su último año de contrato sin firmar esa ampliación y el jugador está por la labor de seguir. Y sin venta de Araujo, el panorama se complica. De Jong nunca ha querido irse y su lesión de tobillo lo impide con rotundiad y Raphinha sigue bien apadrinado. Cuesta creer que el Barça no se plantee forzar su salida si tiene la intención de fichar a Nico Williams y Dani Olmo de una tacada, pero es así. Raphinha no quiere moverse del Barça y nadie le presionará para que suceda lo contrario, por lo que todas las miradas se centran ahora en Vitor Roque, que acabará pagando los platos rotos. El delantero recién fichado en enero está a la venta al mejor postor y si es en Arabia, mejor porque habrá más dinero. Un dinero que hará falta y, quizás, alguna renovación y alguna rescisión de contrato para que todo cuadre.