Buena sintonía con Gündogan para cerrar su marcha al City

Ilkay Gündogan será jugador del Manchester Ciy en las próximas horas. El curso de las negociaciones así lo indica ya que las dos partes trabajan en el mismo sentido. Gündogan quiere salir del Barça, el club le abre las puertas para liberar masa salarial y el Manchester City está encantado por incorporar a un jugador que Pep Guardiola echó de menos la pasada campaña.

OpiniónL. Miguelsanz

Gundogan, víctima de la mala planificación del Barça

El City ganó la Premier League y demostró ser un bloque muy competitivo. Sin embargo, Guardiola veía a Gündogan como su prolongación en el campo y este 'regalo' por parte del FC Barcelona era totalmente inesperado.

En la gira se enfrentaron Barça y City, donde Gündogan saludó de forma visible al staff y ex compañeros, por lo que su vuelta sería bendecida por el vestuario. Se fue como capitán del equipo y sus galones se notaban mucho.

Según informa el periodista Fabrizio Romano, reina el optimismo para que la operación se pueda llevar a cabo. Gündogan tenía otras propuestas del fútbol turco o árabe, pero volver al Manchester City, donde triunfó, le ilusiona en gran manera.

Guardiola quería otro medio

El Manchester City solo había incorporado esta campaña a Savinho tras su cesión al Girona, aunque Guardiola prefería tener a otro futbolista en el centro del campo. Rodri no puede jugar tantos minutos como la campaña pasada y Matheus Nunes, su teórico sustituto fichado a golpe de talonario del Wolverhampton, no funcionó.

Pep también quiere rodar a futbolistas jóvenes como O'Reillyu o McAtee, pero por ahora, Rodri vuelve a ser imprescindible y cuenta con la ayuda de un Mateo Kovavic que sí ha ofrecido garantías.

De todo modos, dejando de la lado aspectos meramente tácticos, Gündogan tiene una jerarquía que siempre necesita un equipo campeón. De Bruyne o Rodri la tienen, pero Gündogan era especial. Con Guardiola tenía un peso específico muy marcado. Su profesionalidad era un ejemplo para el resto y en el campo sabía tomar las decisiones más correctas para el bien del equipo.

De cerrarse la operación, sería un negocio redondo para todas las partes y Gündongan tendría una salida airosa de Barcelona, donde llegó con mucha ilusión, pero tras la marcha de Xavi y el fichaje de Dani Olmo percibió que su hora quizá había acabado.