La hora de Álvaro y María

Llega la hora del atletismo en los Juegos de París, con la marcha atlética como primera prueba el día 1

Serias, muy serias opciones de medalla española de la mano de Álvaro Martín y María Pérez

Alvaro Martín ayuda para que España tenga relevo mixto de marcha en los Juegos Olímpicos

Alvaro Martín ayuda para que España tenga relevo mixto de marcha en los Juegos Olímpicos

SPORT.es

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El deporte rey de los Juegos Olímpicos es el atletismo. Y con la llegada del mes de agosto arrancará por fin en el programa olímpico de París.

Y lo hace con opciones muy serias de medalla para la representación española.

La primera prueba atlética del programa parisino arrancará a las 7.30 horas de la mañana del 1 de agosto, los 20 kilómetros marcha masculinos. Dos horas más tarde dará inicio la prueba femenina.

La marcha española es, a día de hoy, primera potencia mundial. Álvaro Martín Uriol y María Pérez llegan a la capital francesa con la vitola de su doble oro, ambos en 20 y 35 km, en los últimos mundiales de Budapest, el pasado verano.

A sus 30 años, Álvaro Martín quiere redondear un palmarés sensacional con el único titulo que le falta, el olímpico. Tras quedarse a pocos segundos de la medalla en Tokio, el marchador extremeño de Llerena es el gran favorito.

Álvaro ya fue olímpico en Londres 2018 a los 18 años de edad, cuando era la gran promesa de la marcha española. Convertido ya en una áurea realidad, en sus cuartos juegos quiere el oro y es el gran favorito.

María Pérez llega a París también con el peso de ser considerada la gran favorita. La atleta granadina, a sus 28 años, brilló en Budapest con esos dos títulos olvidado ya el nefasto 2022, cuando fue descalificada en casi todas las grandes pruebas.

Varió su técnica, siguió siendo la más fuerte y los títulos han regresado en cascada para la de Orce. La menuda granadina, 1,56 de estatura y 48 kilos, es un torbellino a la hora de marchar y no se conforma con la plata.

Al fin se acerca la hora del atletismo en París, y puede comenzar con un baño de oro para la delegación española.