El Mirandés arranca un punto de A Malata ante un Racing de Ferrol que sigue sin ganar

Bebé debutó con el conjunto gallego tras poner punto final a su etapa en el Rayo Vallecano

Racing Ferrol y Mirandés no lograron romper el empate a cero en el marcador

Racing Ferrol y Mirandés no lograron romper el empate a cero en el marcador / LaLiga Hypermotion

EFE

El Mirandés sumó su tercer empate de un curso en el que aún no conoce la derrota, esta vez sin goles en A Malata ante un Racing de Ferrol que sigue sin ganar en lo que va de temporada de LaLiga Hypermotion.

Los cambios de estrategia y alineación, con el debut del exjugador del Rayo Vallecano Bebé como titular en el Racing como nota destacada, no impidió que el equipo ferrolano siga sin conocer la victoria, con dos puntos de doce posibles en su casillero. El Mirandés acumula seis unidades con una victoria y tres empates.

El extremo fue la gran novedad en el once de Cristóbal Parralo junto a Álvaro Sanz y Julián Delmás, que ya suplió el pasado domingo la salida de Aitor Buñuel, operado este pasado viernes, tras un golpe fortuito contra Pablo Vázquez en el duelo frente al Deportivo. Los verdes quisieron proponer y arrancaron con cierto ímpetu la cita, pero ese inicio acabó pareciendo tibio y se aferraron a Eneko Jauregi como elemento con mordiente, pero el jugador, que no tardó en empezar a buscar resquicios, fue al que más quiso tapar el rival.

El Mirandés aportó poca pólvora y apeló a las distracciones locales, con la presión como su aliado, mientras que Josep Señé, faro de los navales, se encargó de deshacer entuertos por el repunte burgalés a través de las bandas. Una de las acciones más claras llegó en el 22 a cargo de Bebé, que enchufó el balón directamente al portero, Raúl Fernández, desde el costado y, casi sin descanso, el ex del Rayo Vallecano, aliado con Luis Perea, avivó a la afición y abrió un partido más animado.

Por su parte, una conexión de Rincón con Panichelli en el 24 culminó con un esférico por lo alto, pero también pudo abrir el marcador, mientras que en el 26 Joel Roca también retó a Jesús Ruiz, colocado en uno de los palos, y Panichelli, en el 27, lo intentó de cabeza. La defensa pasó algunos apuros y el Mirandés, con más alas, arrinconó a los de Cristóbal Parralo, desdibujados arriba, exigencia ante la cual Luis Perea devolvió cierta esperanza a la carrera en el 32, pero no disparó y el primer tiempo se confirmó como un segmento sin peligro aparente.

Pasados tres minutos del segundo tiempo, A Malata ya se encendió con un pase de Bebé a Luis Perea, que rechazó la defensa del Mirandés, y los navales se volcaron arriba con todos sus efectivos y con sensaciones que apuntaban al cambio con respecto a los primeros 45 minutos. El rival volvió a apelar a las contras, pero mantuvo la ausencia de efectividad y se cargó con tres tarjetas en un minuto, una de ellas por simular una acción de penalti a Joel Roca, y el primero en modificar su alineación fue el cuadro visitante en el 57, pero tampoco tardó en hacerlo Cristóbal Parralo, que dio entrada a Álvaro Giménez y Chiki

Chiki, recién incorporado, retó al meta burgalés en el 66 con una chilena, que no fue gol y Dorrio, de disparo cruzado, tampoco firmó gol en el 69, mientras que la seriedad bajo palos de Jesús Ruiz fue decisiva para que las no muy abundantes oportunidades del Mirandés no fuesen a más. La presión aumentó como muestra de querer acariciar el gol, que siguió resistiéndose, en parte por la falta de conexiones adecuadas para finalizar con claridad, y el Racing de Ferrol se tuvo que conformar con un empate que mantiene al equipo en la parte baja de la tabla clasificatoria de Segunda División.