El Real Madrid ya es un polvorín

Mbappé ha dinamitado los equilibrios del vestuario y la primera víctima es Rodrygo a quien le encantaría poder fichar en este mercado por el City

Florentino ha pagado a Kylian la mayor prima de fichaje de la historia del fútbol, lo que ha desatado una guerra de egos

Mallorca - Real Madrid: El gol de Rodrygo

Joaquim Piera

Joaquim Piera

Solo se ha disputado una jornada de Liga y el vestuario del Real Madrid ya ha volado por los aires. Que el fichaje de Kylian Mbappé iba a destruir el equilibrio interno con su sistema de pesos y contrapesos era previsible, lo que nadie podía prever es que esto sucediera tan pronto, en pleno mes de agosto, cuando el mercado veraniego aún está en abierto.

Por muchas toneladas de pintura que utilice la Caverna para blanquear los verdaderos números de la ‘operación Mbappé’, la realidad indica que Florentino ha pagado la mayor prima de fichaje de la historia del fútbol. Pueden crear el relato que quieran y enmascararlo de forma legal en la partida que crean oportuno, pero es así. Y, claro, la onda expansiva de todo esto ha desestabilizado un vestuario que, como todos el de los grandes clubes, es una concentración de egos y estrellismo. En el de este Madrid aún más por sus recientes éxitos europeos.

La primera víctima del ‘efecto Mbappé’ es Rodrygo, como el propio futbolista se ha encargado de escenificar. Porque sí, ha sido él, y no cualquier interpretación periodística desde Barcelona el que ha traslucido su enojo. Lo ha hecho con una publicación (borrada minutos después de forma estratégica) que había publicado en su canal de WhatsApp en que se quejaba porque no lo incluían en el nuevo tridente merengue. La BMV (Bellingham, Mbappé y Vinicius), que, por cierto, no le hace ni cosquillas a la MSN, que empezaba con la M de Messi el mejor que nunca hubo y posiblemente habrá.

Rodrygo ya empezó con sus pullas preventivas contra Kylian en mayo en la semana previa a la final de la última Champions League. En Brasil, se interpretaron sus palabras como una forma de reivindicarse. El incendio, sin embargo, se apagó mal.

Tres meses después, las pullas se han transformado en malestar. Hay ‘caso Rodrygo’. Porque un día, el internacional canarinho sale diciendo que solo piensa en seguir triunfando en Madrid, y el otro la lía en sus cuentas oficiales en las redes sociales.

Su futuro está lejos del nuevo y sin aislamiento acústico Bernabéu. Si fuera por él, emprendería hoy mismo viaje hacia Manchester, donde Guardiola lo recibiría con los brazos abiertos,y podría recuperar su posición natural, que es la de extremo izquierdo.

La única duda es si Ferran Soriano y Txiki Begiristain estructurarán una oferta en esta recta final de mercado, lo que sería sin duda una de las bombas del verano, o se esperarán para las próximas ventanas.

Aquí también hay que ver cuál será la actitud de Florentino a quien no le tiembla el pulso para extirpar a los díscolos... y las finanzas merengues no son tan boyantes como aparentan.