Opinión

Una plata 'de calle' que se gestó tras una canasta imposible

Sandra Ygueravide, en una acción de la final de este lunes

Sandra Ygueravide, en una acción de la final de este lunes / EFE

Un deporte de calle ha dado una de las mayores alegrías a España en estos Juegos Olímpicos. Una especialidad debutante en la que España se metió gracias a una canasta de espaldas. Fue en el Preolímpico de Debrecen, en las semifinales contra Canadá. Gracia Alonso, la autora de aquel enceste en el mes de mayo, no podía imaginar en ese momento lo que pasaría en París, la noche del 5 de agosto de 2024.

Gracia Alonso, Vega Gimeno, Juana Camilión y Sandra Ygueravide son las integrantes de un cuarteto que pasará a la historia del deporte español. Rubricaron su excelente fase de grupos metiéndose en semifinales con otra canasta en la prórroga y sorprendieron en la penúltima ronda a la potente escuadra de Estados Unidos. En la final, contra Alemania, otro partido agónico. España perdió el encuentro decisivo por un punto, pero la plata le debe saber a gloria.

Muchos –incluso los ‘medallólogos’ habituales de estos días, que seguro que no contaban con esta presea- habrán descubierto esta especialidad del deporte de la canasta que solo necesita media pista de una cancha de basket y que ni siquiera precisa que está presente en el banquillo la entrenadora. Pero Gracia, Vega, Juana y Sandra no solo han dignificado el 3x3 sino que reivindican el futuro de un deporte callejero que ha supuesto la novena medalla para el deporte español en París.

Algunos puristas del baloncesto, esos que defienden con un cuchillo entre los dientes el deporte que James Naismith creó con un par de cestas de melocotones, no ven con buenos ojos la irrupción del 3x3. Pero esto es una realidad que no hay quien la pare. Y más, después del exitazo de la selección femenina española en estos Juegos Olímpicos, lo que seguro que hará aumentar el número de practicantes.

París está luciendo estos días sus calles, edificios históricos y hasta su poco salubre río Sena en los diferentes acontecimientos olímpicos. Y en sus calles España ha conquistado una medalla de plata gracias a una ilusión que empezó con una canasta de espaldas en Debrecen. Un premio a la esperanza y a la constancia. ¡Felicidades, equipo!

TEMAS