Orgullo de País

La gente de Catalunya en general y de Barcelona en particular siempre se ha caracterizado por ser referente, creativa, solidaria e innovadora. Desde los grandes acontecimientos de impacto internacional como la Exposición Universal de Barcelona en 1.888 y la Exposición Internacional de Barcelona en 1.929 hasta los Juegos Olimpicos de Barcelona en 1.992. 

La F-1 descubre que no hay otro lugar mejor que Montmeló, Barcelona y Catalunya

Por ser los más recientes, los Juegos de Barcelona’92 resituaron Barcelona y por ende Catalunya en el mundo. Abrieron Barcelona al mar, se construyeron varias infraestructuras que aún hoy son referentes. En ese momento, también hubo alguna crítica y reticencia por parte de un grupo reducido de personas. Pero la valoración a largo plazo, más de 30 años después, no puede ser otra que de agradecimiento y autosatisfacción. Un esfuerzo colectivo con participación masiva en cuanto a ciudadania mediante voluntariado, coordinación entre administraciones y unión en todos los sentidos. Mucha gente implicada, pero justo es reconocer a tres grandes personalidades, Juan Antonio Samaranch, Presidente del COI, Pasqual Maragall, Alcalde de Barcelona y el MHP de la Generalitat de Catalunya, Jordi Pujol. 

Ahora estamos en un proceso de una nueva transformación del País y la capital en particular. Debemos decidir entre todos qué modelo queremos, pero lo cierto es que cuando la sociedad en su conjunto, el empresariado y los poderes fácticos van de la mano, no hay quien nos pare. Respetando muchísimo a las personas que opinan distinto y todas las sensibilidades, también es justo reconocer el esfuerzo de muchas personas y entidades que están trabajando intensamente y muy bien para posicionarnos en los lugares de privilegio. 

El último ejemplo lo tenemos en el magnífico evento celebrado en Catalunya con motivo del Gran Premio de Fórmula 1. La exhibición por el centro de Barcelona, acercando este magnífico espectáculo a la ciudadanía en general, la inauguración de unas nuevas instalaciones en el Circuit de Catalunya y el magnífico resultado del Gran Premio con asistencia de más de 300.000 personas entre viernes, sábado y domingo, presenciando la carrera 125.000 personas en directo, son palabras mayores.

La comunión público-privada del Circuit, con la Generalitat de Catalunya, el Ajuntament de Montmeló y el RACC. Muchas personas han contribuido. Destacar el reciente acuerdo estratégico suscrito por el Circuit con La Fira de Barcelona, presidida por Pau Relat. Igualmente justo es resaltar dos figuras que han liderado esta exitosa celebración, el President del Circuit y Conseller d’Empresa, Roger Torrent, quien ha negociado los acuerdos, ha sido capaz de mantener la cohesión entre todas las partes implicadas y se ha ganado el respeto y admiración del mundo de la F1, persona discreta a quien sabemos no le gusta estar en el foco mediático y espero me perdone por ello, el Consejero Delegado del Circuit, Oriol Sagrera. También es justo destacar la figura del Alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, que permitió que la F1 se acercase a la ciudadanía en una calle tan emblemática de la ciudad como el Passeig de Gràcia. 

A nivel mediático, resaltar la notoriedad del País durante varios días a nivel mundial. No tiene precio. La imagen de perfecta organización, tanto directa del evento, como de servicios y seguridad nos conceden una imagen de territorio con un gran talento que es capaz de competir con cualquiera. 

A nivel económico, el esfuerzo de las administraciones y entidades queda sobradamente compensado, solo con los ingresos impositivos derivados del evento. Además de dinamizar la economía de Catalunya en distintos sectores y generar una importante ocupación. 

Por todo ello, orgullo de País.