Opinión

Lo que De la Fuente le ha enseñado a Hansi Flick

Luis de la Fuente, en un partido de la selección en esta Eurocopa

Luis de la Fuente, en un partido de la selección en esta Eurocopa / Pablo Garcia/RFEF

Una Eurocopa es siempre un barómetro del estado del fútbol. Los partidos de selecciones son imbatibles desde el punto de vista emocional, de ahí que se alcancen audiencias estratosféricas. En cuanto al fútbol, el diagnóstico es menos alentador: entrenadores tacaños, jugadores sobreexplotados y cada vez menos creativos y a menudo una obsesión por el juego físico que perjudica el fútbol asociativo.

Hansi Flick en el entrenamiento del Barça Atlètic

Hansi Flick en el entrenamiento del Barça Atlètic / FCB

Algunos ejemplos de este drama son Inglaterra y Francia, maltratados por dos entrenadores que ahogan el talento con el corsé de sus tácticas, un buen entrenador como Robert Martínez secuestrado por el histrionismo ya caducado de Cristiano Ronaldo o el naufragio general de Italia, sorprendentemente empeñada en convertir a su propio fútbol en el más mediocre del continente.

En medio de este panorama desolador, hay una única excepción, el fútbol alegre, rápido, creativo y moderno de España, la pequeña aldea de Astérix que todavía no ha sido invadida por el fútbol tronco, aburrido y especulativo que domina la mayoría de selecciones. El factor diferencial que explica el fútbol brillante y espectacular de La Roja es un vestuario equilibrado y sin egos desbocados, una apuesta decidida por la juventud y un entrenador que siendo fiel al estilo de siempre ha sabido evolucionarlo a un juego más directo, pero manteniendo la idea de la presión y la combinación. La combinación de humildad, fe en unas ideas y apuesta por la juventud es lo que ha llevado al éxito, que ya ha conseguido independientemente de que gane o caiga eliminada.

En realidad, De la Fuente le está enseñando a Hans Flick el camino a seguir en el Barça. En cuanto a los jugadores, queda claro que Lamine debe ser tratado como una estrella y debe rodearse de jugadores con los que esté a gusto (Dani Olmo o Nico Williams). En cuanto a la mentalidad, que el entrenador no pretenda ser la estrella del equipo y le dé el protagonismo a los jugadores ayuda a poner todo el foco en el fútbol. En cuanto al estilo, De la Fuente enseña que conocerlo a fondo no impide renunciar a un juego más directo cuando hace falta. Y en cuanto al vestuario, mimar a los jóvenes y que tengan una convivencia equilibrada con los veteranos ayuda a construir un proyecto ganador.

España no tenía a priori ni la mejor plantilla ni partía como favorita en ninguna apuesta y, sin embargo, es la única selección que suscita entusiasmo. Un espejo donde el Barça puede mirarse y Hansi Flick empezar a edificar su proyecto. Mientras el Madrid tiene todos los focos encima de Mbappé y tendrá que lidiar con el peso de ser el favorito a ganarlo todo, el Barça puede construir alrededor de Lamine y de sus jóvenes extraordinarios un equipo silencioso, sin tanta presión y que vaya creciendo con el tiempo. En el fútbol, como se ha visto esta Eurocopa, nada está escrito de antemano.