Opinión

Flick presenta un Barça eficaz

El Barça celebrando su segundo gol en Valencia

El Barça celebrando su segundo gol en Valencia / JAVI FERRÁNDIZ

El once titular del Barça tenía a cinco jugadores procedentes de la cantera, dos de 17 años y muchas ausencias. O sea, muy lejos de lo que acabará siendo el equipo habitual de Hansi Flick. Por tanto, el principal objetivo del partido era puntuar y se superó con creces. Durante la primera parte, el equipo nos recordó demasiado al de la pasada temporada. Raphinha no se adaptaba en la posición de interior, Ferran pasaba desapercibido y solo algunos destellos de Lamine Yamal y el talento de los jóvenes llamaban a la esperanza. A todo eso, el Valencia se adelantó en el marcador y pudo sentenciar, pero Cubarsí salvó in extremis el dos a cero.

El fútbol tiene estas cosas. El que perdona lo acaba pagando y eso es lo que le sucedió a los locales. Lewandowski logró el empate tras una complicada asistencia de Lamine en el último minuto de la primera parte y marcó de nuevo, al inicio de la segunda, tras un inocente penalti del equipo che.

A partir de aquí poco más. El Barça sin realizar un buen partido logro llevarse los tres puntos y eso es lo que cuenta. Eso es a lo que debe dedicarse ahora este equipo y olvidarse del juego bonito. Tiempo habrá. Son tiempos de ser prácticos y efectivos. Si Hansi Flick logra cerrar el debate del ADN, el Barça saldrá ganando. Cuando un equipo tiene tantas bajas por lesiones y dudas sobre la plantilla final, no hay nada mejor que ganar este tipo de partidos e ir sumando unos puntos que al final del campeonato pueden resultar decisivos.

No fue un partido para enmarcar, no vimos todavía como será el Barça de Flick, aunque se nota que los futbolistas tienen más mordiente, pero se logró la victoria. De momento, no se puede pedir mucho más. La pasada temporada muchos de este tipo de encuentros se perdían con el consiguiente debate sobre el juego del equipo. La ilusión se mantiene intacta.