Opinión

Los efectos colaterales del fichaje de Joao Félix

Raphinha, Nico Williams, Ansu Fati, Ferran Torres... están en la ecuación de la operación

Joao Félix protagonizó una acción espectacular contra el Rayo Vallecano

Joao Félix protagonizó una acción espectacular contra el Rayo Vallecano / Valentí Enrich

Fue el culebrón del año pasado y no descarten que vuelva a ser el de este año. Es lo que sucede con los fichajes de jugadores que generan dudas al que los compra y problemas al que no le quiere vender perdiendo un dineral. Joao Félix no acaba de dar el paso adelante en su carrera. Tiene una gran calidad técnica, eso no se le puede negar, pero por alguna razón insondable, no triunfa en ninguna parte. Es posible, seguro, segurísimo, que sus condiciones estén en las antípodas del fútbol de Simeone. También, que el fútbol inglés no esté hecho para él... Pero, ¿y el Barça?

El estilo del Barça debería ser el que más se ajuste a sus virtudes técnicas. De hecho, al que más debería haber beneficiado la cesión a la desesperada que Barça, Atlético y el jugador cerraron el pasado verano a última hora es al propio futbolista.

No ha sido así. Joao no ha sido titular en un Barça de mínimos y eso es determinante. Pero como en el fútbol no hay nada definitivo, tendremos que dar un mínimo de credibilidad a Flick y Deco, que quieren que siga.

Aún así, su fichaje, vía nueva cesión o pagando un traspaso a la baja, tendría unos efectos colaterales que conviene tener en cuenta. Si se queda Joao Félix, ¿habrá espacio, deportivo y económico, para Nico Williams? Por otra parte, es evidente que cerraría definitivamente la puerta a Ansu Fati, al que cada día se devalúa más. Tampoco Ferran Torres tendría mucho sentido. ¿Estaría Raphinha más cerca de un traspaso estratégico para cuadrar cuentas y necesidades? Y a todo eso, la Eurocopa en juego y Mourinho de por medio. Culebrón.