Opinión

La carta de Xavi a los Reyes Magos

El técnico apuesta fuerte para traer fichajes contrastados y caros

El discurso del Barça parece ir por otro lado

Xavi, enfadado con los suyos durante el encuentro ante el Valencia edn Montjuic

Xavi, enfadado con los suyos durante el encuentro ante el Valencia edn Montjuic / VALENTÍ ENRICH

Una vez confirmada la continuidad de Xavi, lo que importa ahora es consensuar el nuevo proyecto deportivo. Vaya, pactar los fichajes y las bajas para intentar competir mejor el próximo curso teniendo en cuenta que el Madrid va a fichar a Mbappé y, quizás Alphonso Davies, con lo que todo puede complicarse mucho más. El entrenador blaugrana parece que ha apuntado alto en sus peticiones consciente de que la única manera de dar un salto es incorporando a futbolistas contrastados que vengan para ser titulares. Xavi ha hecho su propia carta a los Reyes Magos confiando que esta vez se le haga caso desde el club.

La gran incógnita es si estas demandas son realistas o desde la dirección deportiva, tal y como sucedió el verano pasado, se trabaja en otra línea. Nombres como Kimmich, Bernardo Silva, Simons y algún extremo top por banda izquierda valen muchísimo dinero y cuesta creer que el Barça esté en disposición de ficharlos. Quizás Xavi vive en una realidad paralela o no le cuentan toda la verdad, pero ese planteamiento ambicioso que ha dibujado solo se puede llevar a cabo si se da más de una venta millonaria. O eso o nada.

Parece evidente que el presidente, Joan Laporta, le habrá prometido el máximo esfuerzo para conseguir ingresos que permitan llegar a la regla 1-1 para poder fichar, pero luego queda conseguir los recursos suficientes para tan grandilocuente planificación. Y un club tan endeudado como el Barça, por mucho potencial que tenga, no puede permitirse ciertos lujos pese a quien pese.

Sería bueno que los discursos se consensuasen y se explicara la verdad. No puede ser que un día se diga que el proyecto pasa por los chicos de La Masia y otro día se filtre que van a llegar cinco fichajes de primerísimo nivel. No cuadra nada. O alguien está tomando el pelo o se está actuando con un pelín de inconsciencia que puede llevar a la frustración del entorno a finales de agosto cuando eche el cierre el mercado. Se vienen meses complejos y Xavi no quiere acabar con cedidos o jugadores libres sino con cracks que ilusionen. Será difícil.