El Barça salda con buena nota el inicio de temporada

Llevamos disputadas nueve jornadas en la ACB y ocho en la Euroliga. El balance global del Barça es más que satisfactorio, tanto en juego como en resultados. No cabe duda de que hay un enorme abismo entre la exigencia que marca la ACB y con la que nos topamos, jornada tras jornada, en Europa. Los blaugranas están invictos en la competición doméstica, y tan sólo el Madrid es capaz de seguirles el ritmo.

El tercer clasificado, el Murcia, ya está a tres triunfos del Barça. Esta diferencia en tan sólo 9 partidos no beneficia al torneo y mediatiza la competitividad del mismo. Eso sí, sirve al Barça para dar minutos a todos los jugadores, probar escenarios nuevos y rehacerse de derrotas como la sufrida en Milán. En la Euroliga, suman ya seis triunfos, los de Saras están compitiendo a un gran nivel.

Vienen de encadenar tres salidas seguidas muy complicadas, una victoria ante el Fenerbahce y dos derrotas contra el Maccabi y el Armani, que muestran debilidades, pero también curten a los jugadores. De hecho, de los ocho partidos disputados en la Euroliga, cinco han sido a domicilio. Y ganar lejos de casa es siempre difícil. En resumen, el Barça está adquiriendo una buena dinámica de juego y no deja que un tropezón en Europa le pase después factura en la ACB. Sinónimo de madurez del equipo, y exigencia del técnico.

Repasando algunas estadísticas

El Barça, en algunos aspectos, se comporta casi de manera mimética tanto en la ACB como en la Euroliga. Tiene una media de 80 puntos por partido, y en defensa recibe 70 en Europa y 68 en la ACB. En ambas competiciones anota 8 triples, 21 tiros de dos y 14 tiros libres por encuentro. Saras tiene siempre a cuatro jugadores talismán: Calathes, Higgins, Mirotic y Davies.

A partir de aquí, el resto de hombres, en función del partido, pueden tener mayor o menor protagonismo. No obstante, el técnico blaugrana sigue fiel a su máxima de preferir jugar con pívots pequeños. Los principales damnificados son, sin duda, Oriola y Sanli. Ante rivales con no demasiados cm. como el Maccabi o el Armani, el Barça acaba acoplándose a sus exigencias, en vez de intentar dar más minutos a sus torres.

Por otra parte, quizá sea en el aspecto físico donde los blaugranas notan más las diferencias entre la ACB y la Euroliga. Sin ningún problema en la ACB, más bien todo lo contrario, y mucho sufrimiento ante algunos rivales europeos, los de mayor nivel, que en más de una ocasión superan a los blaugranas en fuerza e intensidad. Un aspecto que veremos como afronta Jasikevicius, en especial en el tramo decisivo de la Euroliga.