Pepe Martí acaba sancionado y furioso con su equipo en Austria

Pepe Martí se marcha de Austria con sensaciones agridulces. Después de subir al podio en la carrera del sábado (2º), poniendo fin a su mala racha de resultados de las últimas semanas en F2, este domingo el piloto barcelonés ha perdido la cuarta posición por una penalización de 30" al parar en boxes durante un virtual safety car. Pero además, antes de conocer la sanción, Pepe ya había mostrado su enfado por la gestión de la carrera de su equipo, Campos Racing.

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Martí ha visto frustradas sus opciones de repetir podio debido a la variedad estratégica y las órdenes de equipo. Estaba en plena lucha por la victoria y el podio, a mediados de la carrera, y desde el muro le dieron ventaja a su compañero Isack Hadjar.

El español había aceptado llevar una estrategia distinta a la del piloto francés con la promesa de luchar por la victoria a final de carrera. Sin embargo en las vueltas finales Hadjar no pudo alcanzar la segunda posición, a pesar de lo cual el tercer puesto no fue devuelto a Pepe Martí, quien mostró su enfado por radio.

“Gracias, gracias, gracias, gracias. Sin comentarios”, lanzaba irónicamente Martí. “Lo hablaremos después de la carrera”, respondieron desde el muro los ingenieros del equipo Campos, apuntando al briefing post carrera en el que abordar estos problemas.

Para colmo de males, después ha llegado la comunicación de su sanción.

En definitiva, un fin de semana de altos y bajos para Pepe, que en su primer año en la categoría antesala de la F2 no lo está teniendo fácil.