El Lille pierde su imbatibilidad ante el Brest

Punto y final a la imbatibilidad del Lille en la liga francesa. El Brest dejó la racha en nueve jornadas. Nueve partidos donde cosecharon cinco triunfos y cuatro empates, lideraron la liga francesa y compitieron contra un PSG que se marcha. Los de Tuchel se van. Cinco puntos son ya los que separan a los parisinos y a 'les dogues' que pagaron su desgaste en Milan donde bailaron a los 'rossoneri' en la Europa League.

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Ligue 1

BRE

3

2

LIL

Alineaciones

Brest
Larsonneur; Pierre-Gabriel, Chardonnet, Duverne, Perraud; Honorat (Battocchio 82'), Belkebla, Lasne, Faivre; Mounié (Charbonnier 78'), Cardona (Le Douaron 78').

Lille
Maignan; Pied (Weah 76'), Fonte, Botman, Bradaric (Mandava 46'); Ikoné (Lihadji 46'), Soumaré (Xeka 46'), Renato Sanches, Bamba; Yilmaz, Yazici (David 66').

Goles

1-0 M.15 Pierre-Gabriel; 2-0 M.19 Perraud; 3-0 M.42 Cardona; 3-1 M.45 Yilmaz (p.); 3-2 M.57 Yilmaz.

Árbitro

Florent Batta. T.A.: Chardonnet (52'), Mounié (56') / Mandava (63').

Incidencias

Stade Francis-Le Ble.

La empanada de los de Galtier se pudo comprobar ya en los primeros compases de partido. Antes del minuto 20, ya perdían por 2-0 tras los goles, en cuatro minutos de diferencia, de Pierre-Gabriel y Perraud. Pudo acortar distancias el Lille si el penalti que pitó Florent Batta no lo llega a cancelar el VAR. La caída de Yazici no fue suficiente.

Del posible 2-1 se pasó a casi la sentencia. O eso debieron pensar los aficionados del Brest. Irvin Cardona puso el 3-0 para delirio del conjunto de la península de Bretaña. Poco les duró la alegría porque el miedo volvió a escena cuando Yilmaz, esta vez no hubo VAR que lo evitara, transformó un penalti en el descuento de la primera mitad.

El Lille salió con otra mentalidad en la segunda mitad y recortó todavía más a falta de media hora con el doblete de un Yilmaz que pudo ser el héroe con el 'hat-trick' pero que terminó perdonando el resto de sus oportunidades. El Brest resistió con todo. El arreón final de los 'dogues' quedó en nada. Y su racha de imbatibilidad, también.