Un Iago Aspas de 'Óscar'

Iago Aspas, voz autorizada en Balaídos

Iago Aspas, voz autorizada en Balaídos / EFE

Francesc Ripoll

Tras el estreno en el Camp Nou, Iago Aspas se convirtió en el actor protagonista de la primera victoria de Óscar García al mando del Celta. El partido fue como una de esas películas que te dejan enganchado hasta que salen los créditos. Y con máxima igualdad, apareció el de Moaña para sentenciar y rubricar el mejor partido de los celestes este curso. Ganan tras cinco derrotas seguidas. De hecho, el último triunfo a domicilio fue, precisamente, en La Cerámica. Cosas del destino. Se nota la mano del catalán al mando de la nave gallega. Hay mejora con y sin balón. 

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Liga Santander

1
3
Alineaciones
Villarreal
Sergio Asenjo, Rubén Peña, Funes Mori, Pau, Quintillá (Ontiveros, 87'), Iborra (Moi Gómez, 57'), Anguissa, Chukwueze, Santi Cazorla, Gerard Moreno y Toko Ekambi (Bacca, 77').
Celta
Sergio, Hugo Mallo, Aidoo, Araujo, Olaza, Lobotka, Pape Cheikh (Fran Beltrán, 76'), Brais Méndez (Santi Mina, 65'), Denis Suárez (Costas, 84'), Pione Sisto y Iago Aspas.

Ambos equipos se presentaban a la cita inmersos en una mala dinámica, y el bajo ritmo con el que empezó el encuentro se podía deducir el miedo a perder que tenían los dos. Eso duró bien poco. Se puso precioso el partido con el paso de los minutos, ausente de centrocampismo y con transiciones muy rápidas. Iborra y Anguissa daban estabilidad en el centro del campo y Chukwueze era un auténtico puñal por banda izquierda. Prácticamente todas las acciones ofensivas pasaban por sus pies. Gerard Moreno lo intentó por tierra, mar y aire, e incluso se le anuló un gol.

El Celta, con menos posesión pero con una idea de juego interiorizada, tuvo la más clara del primer tiempo, cuando un renovado Pione Sisto hizo trabajar a Asenjo para evitar el gol. Se mostró muy activo el danés.  

Los goles, para la segunda parte. Primero el de los celestes. Pase de escándalo de Denis Suárez para Pione Sisto, que controló, orientó y batió a Asenjo desde la frontal. Poco duró la alegría. Jugada elaboradísima del Villarreal, comandada por un Cazorla inspirado en el centro del campo. Tras una dualidad entre Gerard Moreno y Quintillà por banda izquierda, el lateral vio a Chukwueze y este no perdonó. Dos tantos totalmente distintos, pero igual de bonitos.

Se igualaban las fuerzas y Santi Mina y Gerard Moreno avisaban. Hasta que apareció el que tenía que aparecer. Iago Aspas se encontró con un balón dentro del área y él, que vive del gol, no perdonó. Lo necesitaba el capitán. Guardó la ropa Óscar García y Ontiveros se topó con el travesaño. Pero Iago Aspas quería ser protagonista. Tras un carrerón, se zafó de Asenjo, sentó a Peña y sentenció. El Celta es otro. Y ya sonríe.