JJ.OO. | Atletismo

La esperada batalla del 400 vallas se redujo a una exhibición de Rai Benjamin

Marileidy Paulino, Yemisi Ogunleye, Nafi Thiam y Beatrice Chebet, los otros campeones en la penúltima jornada del atletismo en el Stade de France

Benjamin y Warholm, el abrazo de dos estrellas mundiales

Benjamin y Warholm, el abrazo de dos estrellas mundiales / AP

David Rubio

David Rubio

A imagen y semejanza de lo sucedido en la prueba femenina, la anunciada superbatalla de los 400 vallas masculinos se ha saldado con una clarísima victoria del estadounidense Rai Benjamin sobre Karsten Waholm y Alison dos Santos.

Si Sydney McLaughlin-Levrone desfondó a la neerlandesa Femke Bol en la final femenina, este viernes se ha repetido la historia entre Benjamin y su gran rival, aunque al menos el noruego ha sabido frenar su ímpetu y ha conseguido amarrar la segunda plaza.

Benjamin ígualó su mejor marca de la temporada con 46.46 y no dio opción al tricampeón mundial y ya excampeón olímpico Warholm, quien tuvo que conformarse con la plata (47.06) a punto de ser superado por Dos Santos (47.26).

A base de potencia y de un dominio perfecto de la prueba, la dominicana Marileidy Paulino sigue engordado su palmarés y este viernes ha cambiado sus dos platas de Tokio (400 y 4x400 mixto) por un oro en la vuelta a la pista sin vallas que suma al que logró el año pasado en los Mundiales de Budapest.

Paulino es la mejor cuatrocentista del momento

Paulino es la mejor cuatrocentista del momento / AP

La caribeña que pasa parte del año en España no ha tenido rival con récord olímpico (48.17), seguida por la bahreiní Salwa Eid Naser (48.53) y por la polaca Natalia Kaczmarek (48.98). Ganó Paulino con la cuarta mejor marca de la historia tras las de la alemana Marita Koch (47.60), la checoslovaca Jarmila Kratochvilova (47.99) y la subcampeona Naser (48.14).

El desenlace del peso femenino fue espectacular después de verse claramente afectado por la lluvia en las primeras rondas. Todo parecía encaminado a la victoria de la neozelandesa Madison Lee-Wesche con 19,86 cuando la alemana Yemisi Ogunleye cambió la plata por el oro con 20 metros 'clavados' en el sexto intento. Lloró, bailó y lo celebró como una auténtica posesa. Enorme lo que había logrado. La china Jiayuan Song completó el podio con 19,32.

Donde no hubo sorpresas fue en el heptatlón con el enésimo oro para la belga Nafi Thiam, aprovechando los problemas de la británica Katarina Johnson-Thompson con la jabalina. La ya tricampeona olímpica y bicampeona mundial reinó con 6.880 puntos por delante de la de Liverpool (6.844) y de la campeona continental de pentatlón, la también belga Noor Vidts con marca personal (6.707).

Thiam volvió a demostrar que es la más completa

Thiam volvió a demostrar que es la más completa / EFE

Por último, la final femenina de 10.000 metros ofreció un detalle que no debería quedar en el olvido como ya demostró el estadounidense Rooks en los 3.000 obstáculos masculinos: no hay nada imposible en el atletismo. Pese a la superioridad africana en las pruebas de fondo, la italiana Nadia Battocletti ha hecho historia en el Stade de France.

La final se decidió en una última vuelta en la que la campeona continental fue especialmente valiente y peleó hasta la recta por una victoria que terminó logrando la keniana Beatrice Chebet para culminar el 'doblete' tras su triunfo en 5.000. Acreditó 30:43.25, la italiana logró una plata de enorme mérito con récord nacional (30:43.35) y la neerlandesa Sifan Hassan repitió el bronce de las 12 vueltas y media con 30:44.12.