Dovbyk, la 'pesadilla' de Bellingham

Artem Dovbyk empezó a ser una cara conocida a partir del pasado verano. El ucraniano aterrizó a una gran liga europea a los 26 años, cuando el Girona puso 7,75 millones de euros sobre la mesa del Dnipro-1 para traerlo a LaLiga. Desde entonces, se ha convertido en una de las referencias del torneo y en la particular 'pesadilla' de un Jude Bellingham imparable.

Daley Blind, el soldado de Míchel

El flamante fichaje del Real Madrid está firmando unos números difíciles de igualar en su primer año en España: 13 goles y 2 asistencias en 17 partidos del campeonato doméstico. En total, 15 participaciones de gol que le han venido de perlas al cuadro dirigido por Carlo Ancelotti para mantenerse en la cima de LaLiga.

Instalado en lo más alto del Pichichi, el inglés nota el aliento en la nuca de Álvaro Morata y Borja Mayoral (con 12 dianas) y de Artem Dovbyk y Antoine Griezmann (con 11 goles). Sin embargo, nadie ha firmado tantas contribuciones al gol como el ucraniano.

EL PULSO CON BELLINGHAM

Del mismo modo que el ex del Borussia Dortmund, la referencia ofensiva del Girona de Míchel ha caído completamente de pie en LaLiga. Tanto que con la última asistencia que le sirvió a Daley Blind, en la victoria 'in extremis' ante el Atlético de Madrid (4-3), superó a Bellingham como el jugador que ha participado directamente en más acciones que han terminado en gol en el torneo doméstico.

Dovbyk, que registra 11 goles y 6 pases de gol en 18 duelos, suma 17 participaciones de gol. Unas cifras estelares que, precisamente, otorgan licenica para soñar al Girona, colíder junto al Real Madrid.

UN FUTBOLISTA MUY COMPLETO

Elegido mejor jugador del mes de diciembre en LaLiga, Dovbyk es un futbolista que siempre lleva el mono de trabajo puesto. Clave para dar salida al equipo en largo, peleando de tú a tú contra los centrales rivales, el ucraniano hace vale su gran altura (1,89 metros) para luchar cada balón con uñas y dientes.

Con él sobre el terreno de juego el esfuerzo es inegociable. Lleva el gol en la sangre y decide partidos sin necesitar estar constantemente en contacto con el balón. Es un futbolista inteligente, y por eso brilla bajo las órdenes de Míchel. Además de ser un gran fijador de centrales, es bastante hábil para abandonar la punta de ataque y generar espacios para que los jugadores de banda o segunda línea se beneficien de ellos.

Con contrato hasta verano de 2028, si el Girona logra mantenerlo lejos de las garras de la Premier, Montilivi tendrá referencia en ataque para muchos años.