Piden dos años de cárcel para Promes por asalto agravado

El Ministerio Público neerlandés acusa al jugador del Spartak de Moscú y ex de Sevilla y Ajax de este cargo tras un apuñalamiento a un primo

Promes vio reducidos los cargos que se le imputaban, ya que en un inicio se le pedían cuatro años de prisión por tentativa de asesinato

Promes celebra el gol al Nápoles

Promes celebra el gol al Nápoles / AFP

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El Ministerio Público (OM) de Países Bajos ha exigido este viernes dos años de prisión contra Quincy Promes por asalto agravado. El futbolista del Spartak de Moscú y ex de Sevilla y Ajax, entre otros, está acusado de apuñalar a un primo en la rodilla en una fiesta en Abcoude (Países Bajos) el 25 de julio de 2020.

En un inicio a Promes se le acusaba de tentativa de asesinato o intento de homicidio involuntario, pero los fiscales dijeron en un comunicado que no había pruebas suficientes para confirmar dichos cargos. Los testigos vieron a Promes hacer varios movimientos de apuñalamiento cuando su primo estaba en el suelo, pero según el OM, no intentó matar a la víctima. Lo apuñaló en la rodilla y nadie lo vio apuntándole a la ingle o al cuerpo.

El contexto del suceso fue que ocurrió en la fiesta de cumpleaños del hermano de Quincy. Una discusión y una pelea lo precedieron. Según el OM, el motivo fue que su primo le robó un collar por valor de 3.000 euros a la tía de Promes en 2015. En una conversación grabada con su tía, Promes supuestamente dijo que le había “devuelto el honor”.

La víctima sufrió heridas graves en el incidente de apuñalamiento. El cuchillo lo golpeó en un tendón importante, lo que lo dejó sin poder usar la pierna durante mucho tiempo. Tuvo que rehabilitarse durante mucho tiempo y ya no puede ponerse en cuclillas ni correr. También tiene trastorno de estrés postraumático.

La víctima reclama una indemnización de 30.000 euros por daño inmaterial y quiere recuperar el daño material en una demanda civil. Esa cantidad supera el millón de euros, reveló en la audiencia.

Promes no acudió a su juicio en la corte de Ámsterdam por obligaciones contractuales con el Spartak de Moscú. El exinternacional neerlandés teme ser arrestado si va a Países Bajos ya que además el OM quiere interrogarlo en otro caso en el que está involucrado.