Euforia tras el séptimo doblete juvenil del siglo XXI

La Masia sigue latiendo con fuerza. La victoria en la Copa de Campeones Juvenil del sábado fue la enésima demostración de que los canteranos del Barça suben con fuerza. Los de Óscar López se impusieron en la final al Athletic Club, gracias a los tantos de Álex Valle y Fermín López, conquistando, así, el séptimo doblete en lo que llevamos de siglo XXI.

También lo hicieron en 2018, 2014, 2009, 2006, 2005 y 2000. Unos datos que confirman la enorme competitividad que hay detrás de todos estos triunfos. “Esto es muy difícil de lograr y nosotros lo hemos conseguido”, gritaba el capitán Marc Casadó en el vestuario de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. La euforia fue total entre bastidores, así como, también, en el autocar de regreso a Barcelona.

El triunfo tuvo un mejor sabor de boca después de quedarse con la miel en los labios el curso pasado, cayendo en la final por 3-1 frente al Deportivo de la Coruña. Pero también ha servido para reivindicar a un grupo que cayó en la fase de grupos de la UEFA Youth League a principios de temporada.

El equipo por encima de todo

Esta generación ha demostrado que juntos son más fuertes y que crecen como colectivo, por encima de las individualidades. De nada sirve la solidez de Diego Almeida, la potencia de Álex Valle, el liderazgo de Marc Casadó, la técnica de Aleix Garrido, la magia de Ilias Akhomach, la chispa de Estanis Pedrola o los goles de Víctor Barberá -por decir algunos ejemplos-, si como grupo no estuviesen tan unidos.

A todos ellos, también habría que añadir a Gavi, pero su meteórico progreso ha sido imparable y con 17 años ya se ha ganado un puesto inamovible en el primer equipo de Xavi Hernández.