Estas son las tres razones para cancelar la hipoteca en el Registro de la Propiedad

Finalizar la hipoteca es uno de los momentos más deseados para la mayoría de ciudadanos españoles

Después de finalizarla, hay que proceder a la cancelación registral de la hipoteca, un paso fundamental que mucha gente pasa por alto

Firma de hipotecas.

Firma de hipotecas.

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Acabar con la hipoteca es uno de los momentos más deseados para la mayoría de ciudadanos españoles, que han tenido que financiar la compra de su vivienda. Este momento supone la tranquilidad de no tener que volver a paga la cuota hipotecaria cada mes, lo que significa un desahogo económico importante.

Después de finalizarla, hay que proceder a la cancelación registral de la hipoteca, un paso fundamental que mucha gente pasa por alto. Lo primero, no hay que confundir la cancelación económica, que es cuando se finaliza la hipoteca, con la cancelación registral, que es cuando el Registro de la Propiedad determina que la propiedad ya no tiene hipoteca.

De la misma forma que hay que registrar la firma de la hipoteca, también hay que registrar su cancelación. Este trámite es muy importante, puesto que aunque la hipoteca esté pagada, si en la Nota Simple de la propiedad no consta, seguirá apareciendo como vivienda hipotecada.

Aunque la cancelación registral no es obligatoria, los Registradores de España apuntan que es importante hacerla por tres motivos: Deja la propiedad libre de carga, posibilitando contratar una nueva hipoteca; el valor de una finca libre de cargas, a efectos de la solvencia patrimonial, es mayor que el de una hipotecada; y si se vende el inmueble, el comprador exigirá que esté libre de cargas e hipotecas.