Marte se podría parecer más a la Tierra: Los humanos ya podrían terraformar el planeta rojo

Durante mucho tiempo, científicos de todo el mundo se han esforzado en viabilizar la vida humana en Marte. Las investigaciones en torno a dicha posibilidad han sido numerosas pero, a día de hoy, sigue pareciendo un futuro lejano. Sin embargo, ello no ha hecho mermar los intentos de los especialistas, quienes han dado con una nueva alternativa que, finalmente, podría encaminarnos hacia tan anhelado objetivo.

Los científicos creen que podría haber vida en este océano de Marte

A dicho respecto, un inédito equipo dirigido por Samaneh Ansari, estudiante del Departamento de Ingeiera Eléctrica e Informática de la Universidad de Northwestern de Chicago, ha traído una innovadora propuesta para terraformar Marte, es decir, para concederle condiciones habitables para los seres humanos.

Bajo la premisa de que, actualmente, terraformar Marte pasa por, en síntesis, calentar el planeta, engrosar la atmósfera y derretir el hielo de agua, la investigación de Ansari y compañía señala el uso de partículas de polvo diseñadas a partir de minerales locales. Debido a misiones como Curiosity y Perseverance, que han obtenido muestras del suelo de Marte para su posterior análisis, se sabe que los granos de polvo del planeta cuentan con hierro y aluminio, por lo que se pueden configurar partículas transformadas en nanobarras conductoras de 9 micrómetros de largo que se liberen a la atmósfera en aras de que absorban y dispersen la luz solar.

Con base en una vida útil de 10 años para las partículas, fue posible hacer simulaciones de dos modelos climáticos cuyos resultados indican que este proceso podría calentar Marte en más de 30°C, lo cual sería suficiente para derretir los casquetes polares. Este método es, según la investigación, hasta más de 5.000 veces más eficiente que las propuestas anteriores para inducir un efecto invernadero en Marte; un método que, además, viabilizaría que el entorno marciano fuera adecuada para la vida microbiana dado el aumento de la temperatura media.

No obstante a lo anterior, aún se necesitan más investigaciones pues, antes de ejecutar la propuesta en Marte, es necesario discernir cómo las partículas se pueden ver afectadas por los cambios atmosféricos del planeta. En este momento, Marte presenta formación de nubes y precipitaciones en forma de hielo seco, el cual se condensa en la atmósfera y vuelve a caer hacia la superficie como nieve de CO2, por lo que habría que esperar que se derritan los casquetes polares para que las precipitaciones incluyan agua (que podrían condensarse alrededor de las partículas) y, de este modo, hacer que caigan de nuevo a la superficie en forma de gotas de lluvia.