Manchas en la piel: Cómo puedes prevenir que aparezcan en verano

La radiación ultravioleta (UV) es la principal culpable del envejecimiento cutáneo. Además, también incrementa la producción de melanina, la sustancia que forma células para defenderse del daño que provoca el sol.

Esta es la principal razón (doble) por la que aparecen las temidas manchas, principalmente en verano, sobre todo cuando las horas de exposición al sol aumentan con la playa y menor cantidad de ropa.

Los especialistas lo tienen claro: debes tener cuidado a la hora de exponerte al sol, utilizar la protección adecuada y evitar el tramo central del día. De lo contrario, pueden aparecer manchas en cualquier parte del cuerpo, pero sobre todo, en cara, escote, manos, brazos y piernas. Estas son las zonas más expuestas a la radiación ultravioleta.

Léntigos solares y melasma: los dos tipos de manchas en la piel

Los lentigos son pigmentaciones que parecen grandes pecas; en cambio, el melasma es una mancha café, extensa y difusa, que surge generalmente en mejillas, nariz, frente o sobre el labio, y es más común en las pieles más oscuras. En cualquier caso, lo que mejor funciona es la prevención: utiliza protección solar, no tomes el sol en las horas centrales del día y protégete durante todo el año.