Los sorprendentes beneficios de las ciruelas para los mayores de 50 años

Estas frutas tienen propiedades muy beneficiosas para la salud de las personas mayores

¿Por qué las ciruelas pasas son consideradas un 'superalimento'?

¿Por qué las ciruelas pasas son consideradas un 'superalimento'? / Sport

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Las ciruelas son una de las frutas más deliciosas y refrescantes del verano. Con su piel tersa y brillante que puede variar en colores desde el amarillo hasta el púrpura oscuro, cada mordisco ofrece una explosión dulce y ligeramente ácida que es simplemente irresistible. Además de su sabor excepcional, las ciruelas son ricas en vitaminas A, C y K, así como en antioxidantes y fibra, lo que las convierte en una opción saludable para cualquier dieta.

Las ciruelas frescas son una delicia, pero las ciruelas pasas ofrecen beneficios nutricionales que pueden hacerlas aún más atractivas. La deshidratación concentra las propiedades nutricionales de la fruta, haciendo que sea más fácil consumir una mayor cantidad de nutrientes en menor volumen.

Esto es particularmente relevante dado que muchos estudios que han demostrado efectos positivos para la salud se han realizado con ciruelas pasas.

Es especialmente importante considerar añadirlas a la dieta después de los 50 años, cuando mantener una buena salud se vuelve crucial. Según un estudio de la Universidad Estatal de Florida, consumir entre 50 y 100 gramos de ciruelas pasas al día durante un año puede reducir el colesterol LDL (malo) y aumentar el colesterol HDL (bueno).

Esto ayuda a prevenir la formación de placas en las arterias, reduciendo el riesgo de aterosclerosis y, por ende, de problemas cardiovasculares graves.

Además, las ciruelas pasas son eficaces en la disminución de la inflamación crónica, un factor de riesgo para enfermedades como la diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer. Investigadores de la Universidad Estatal de Pensilvania han encontrado que el consumo regular de ciruelas pasas puede reducir los niveles de citoquinas proinflamatorias, proteínas que, si se liberan en exceso, pueden dañar varios órganos del cuerpo.