El Espanyol deberá explotar el mismo bloque

Vicente Moreno vive un ‘déjà vu’. Como Bill Murray en ‘Atrapado en el tiempo’ –también conocida como ‘El día de la marmota’-, el técnico de Massanassa podría estar en 2020 a juzgar sólo por su plantilla. En uno de los veranos más atípicos que se recuerdan para el Espanyol, Sergi Gómez es el único nuevo inquilino del vestuario. El club ha mantenido el mismo bloque, ejerciendo además las opciones de compra obligatorias por Dimata, Vadillo y Miguelón, y a 48 horas del inicio de liga en El Sadar afronta el regreso a Primera como si fuera una prolongación de Segunda.

Los encargados de devolver a la entidad a la élite serán los mismos que deberán, al menos, mantenerla en ella. Sin tener en cuenta las citadas opciones de compra por los tres cedidos, el Espanyol sólo ha gastado un millón de euros en refuerzos. Fue lo que costó traer a Sergi Gómez. No se veía un verano tan ‘agarrado’ económicamente hablando desde hace dos décadas. En la 2001/02, el club hizo más refuerzos pero todos a coste cero, ya fuese por llegar libres o como cedidos. Hablamos de futbolistas como Catalin Munteanu, Paulo Sousa, Francisco Palencia, David Aganzo o Antonio Pacheco, entre otros.

De este modo, el Espanyol mantiene casi intacto el bloque de antaño, porque además no ha tenido ni una sola baja hasta la fecha. La buena noticia es que el límite salarial está en positivo, aunque con poco margen. Este escaso beneficio impide, de momento, acometer el ansiado fichaje del mediocentro defensivo que pide Vicente Moreno. Es una de las zonas que más necesita apuntalar el equipo, sin perder de vista la posibilidad de traer un nuevo delantero.

Lo que está claro es que sin salidas y con la inyección económica del plan de Javier Tebas vía ‘LaLiga Impulso’ en cuarentena, la dirección deportiva sigue atada de manos y pies. Para el inicio de liga no se esperan novedades aunque las casi tres semanas que restan para que termine el mercado sí podrían dar mucho de sí.

De momento, en las primera fechas todo apunta a que la columna vertebral de Moreno, con Diego López, Leandro Cabrera, Keidi Bare y Raúl de Tomás como hombres más destacados en cada línea, deberá sustentar a un equipo al que se le exigirá una marcha más. Por muy competida que resulte la categoría de plata española, o hay nada como Primera División. Aquí los errores se pagan más caros y tiene el Espanyol como recuerdo reciente un descenso que bajo ningún concepto puede volver a consumar.