Pedri, de la genialidad al alivio

Si Pedri está fino y sano, todo fluye en el FC Barcelona. Muy a nuestro pesar, nos hemos visto privados de su elegancia y su magia sobre el verde demasiado en los últimos tiempos. Es por ello que tanto el tinerfeño como el club se pusieron manos a la obra para intentar rebajar al máximo el riesgo de lesión muscular. Sobre todo para fortalecer esa zona posterior del muslo que tanto le ha castigado estas pasadas temporadas.

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Tras caer en la Eurocopa, el de Tegueste trabajó tanto en la Ciutat Esportiva Joan Gamper como en Tenerife en sus ‘vacaciones’ para regresar de la mejor forma. Y lo cierto es que en estas tres primeras jornadas nos ha regalado ya buenas dosis de ese tarro de las esencias tan característico y anhelado por los técnicos en Can Barça.

Pedri avanza hacia su mejor versión

UNA SOCIEDAD ILUSIONANTE

Pedri disputó el partido completo ante el Athletic en casa y anoche prácticamente todo en Vallecas. Ya venía de jugar una buena primera media hora frente al Valencia en Mestalla. Ayer quizás no estuvo tan fino en una primera mitad en la que el Barça, sobre todo en el inicio, se vio superado por la presión agresiva del Rayo.

Pero luego, coincidiendo con la entrada de Olmo, se entonó. Y empezó a asociarse y a hacer daño de verdad. De ahí vino el 1-1 en una gran pared con Raphinha. Todo iba como la seda hasta que en el 90’ Pathe Ciss hizo una entrada durísima, por encima del límite del reglamento. Parecida a la que sufrió en la Eurocopa con Kroos. Pero sin balón.

SE TEMIÓ ALGO GRAVE

Pedri se retorció de dolor en el césped y todos nos temimos lo peor. Volver a ese ‘infierno’. En el banquillo se encogieron los ánimos. Fermín, que estaba calentando, se enfundó rápido la camiseta. Por suerte, el tinerfeño fue incorporándose y pudo salir por su propio pie, lo que alivió la congoja general.

Ya con el choque terminado, Pedri andaba más o menos con normalidad. Y atendió a la prensa, por lo que la sensación ya era de que había sido solo el impacto. Flick lo confirmó en rueda de prensa y al jugador se le vio tranquilo pasar por delante de los periodistas en zona mixta. Eso sí, con dos heridas en forma de taco en la tibia. Solo fue amarilla.