Flick y su libreto enganchan al barcelonismo

En medio del caos y del ruido, al Barça le ha venido como agua de mayo contar con un técnico metódico y del sentido común de Hansi Flick. Son solo dos partidos, pero ya se empieza a vislumbrar el ‘libreto’ del alemán. Su equipo fue superior al Athletic Club, se hizo con la segunda victoria consecutiva en la Liga y duerme, ni que sea por unas horas, con cinco puntos de ventaja sobre un Real Madrid que esta tarde (17.00 horas) recibe al Valladolid y ya siente la presión encima por mucho que con Mbappé y compañía crean que esto va a ser un paseo blanco.

Pedri afina al Barça y Lewandowski asesta el golpe final

También se esperaban seguramente Valencia y Athletic Club más facilidades, o al menos, un Barça más ‘desquiciado’ por todo lo que se vive fuera del terreno de juego. Pero en el verde, en el banquillo, manda Hansi Flick, que no pone excusas a las dificultades y que saca un alto rendimiento de lo que tiene. Claro que hay mucho a mejorar y así se apreció ante los rojiblancos, pero nadie discutió la victoria y que durante muchas fases del encuentro, el juego del Barça, tanto en ataque, como en defensa, como en las transiciones, fue notable.  

Los protagonistas reales

El partido estaba marcado por dos nombres propios. Por un lado, el de Dani Olmo. Flick tenía esperanza en la rueda de prensa previa de que el club lo pudiera inscribir a tiempo y se lo llevó convocado. El egarense, con una cara que pagaba y que era del todo lógica, lo tuvo que ver desde la grada. Los focos apuntaban en el césped a Nico Williams, un nombre asociado de forma intensa al Barça en el mercado, pero que sin garantías económicas y con la presión ejercida desde Bilbao, ha habido poco que hacer.

A la hora de la verdad, el protagonismo se lo llevó con toda justicia un Marc Bernal imperial en el pivote defensivo, un Pedri que le acompañó y dio todo un recital de pases y visión de juego o un Lamine Yamal al que ningún rival logró frenar cuando se puso a hacer diabluras por la banda. Tampoco su gran amigo Nico, del que se fue cómo quiso en el golazo que abrió el marcador. Control, regate y golpeo.

Combinación ganadora

Hansi Flick está logrando una mezcla perfecta de juventud y veteranía, pues al final, la victoria llegó tras un gol de Lewandowski. Cierto que el polaco se había estrellado antes con los palos y el meta del Athletic Padilla, pero si Lewy ha llegado tan lejos es por su insistencia y voracidad. El ‘killer’ no paró hasta que logró su recompensa.

Montjuïc, con una entrada mejor de la prevista, dio su ‘visto bueno’ a Hansi Flick y su proyecto, un técnico honesto que tras el partido chocó la mano, uno a uno, con todos sus futbolistas y se fue después a saludar a unos aficionados que le esperaban en las gradas. Al de Heidelberg se le apreció visiblemente contento y satisfecho. El martes, habrá una nueva reválida, Vallecas no dará tregua, pero por ahora, su Barça pinta bien. Aunque no se lo estén poniendo nada fácil...