Evan Fournier desata la locura en su llegada a Grecia

La nueva estrella de Olympiacos congregó a miles de personas en el aeropuerto de Atenas, que le dieron una cálida bienvenida

Evan Fournier, en su llegada a Atenas tras fichar por Olympiacos

Evan Fournier, en su llegada a Atenas tras fichar por Olympiacos / Olympiacos

Marc del Río

Marc del Río

Evan Fournier está llamado a ser uno de los grandes nombres de la próxima temporada en el baloncesto europeo. El exterior francés ha puesto punto final este verano a 12 años de trayectoria en la NBA, en la que militó en Denver Nuggets, Orlando Magic, Boston Celtics, New York Knicks y Detroit Pistons.

A punto de cumplir 32 años, y sin hueco en la mejor liga de baloncesto del planeta (negoció con Milwaukee Bucks y Washinghton Wizards), Fournier ha cumplido su voluntad expresada hace dos años, en la que dejó caer, a través de sus redes sociales, que en caso de regresar a Europa, le gustaría hacerlo de la mano de un Olympiacos, con el que ha firmado para las próximas dos temporadas.

El gran objetivo de Fournier con Olympiacos

En las últimas horas, el francés llegó a Atenas para empezar a trabajar ya y conocer a sus nuevos compañeros. Como es habitual en Grecia cuando llegan jugadores de talla mundial, el aeropuerto de la capital helena se llenó de aficionados de Olympiacos, que aguardaron la llegada de Fournier para recibirlo con una cálida bienvenida. El vigente subcampeón olímpico se mostró pletórico por ese recibimiento, que se produjo de madrugada, y su discurso no pudo ser más ambicioso: "Lo más importante es que quiero ganar la Euroliga con Olympiacos", desveló.

La locura en el aeropuerto

"Gracias a todas las personas que han venido a recibirme al aeropuerto, ha sido uno de los momentos más locos de mi vida. Gracias por el amor, estoy con muchas ganas de empezar a trabajar y de vestir esta camiseta", comentó, en un vídeo publicado por Olympiacos a través de sus redes sociales.

Fournier, que firma dos temporadas por un montante total de cuatro millones de euros, se une al otro fichaje faraónico llevado a cabo por Olympiacos este verano, como es la vuelta de Sasha Vezenkov al Pireo, con un salario neto por curso superior a los tres millones y medio de euros. Una apuesta económica importante, que demuestra que el dinero ha vuelto de nuevo a Grecia, y con la que se pretende plantar batalla a los vecinos de ciudad, un Panathinaikos que defenderá el título europeo este próximo curso.