La vuelta de Ricky al Barça obligará a Grimau a mover ficha

El técnico azulgrana tendrá que reajustar el juego exterior para dar cabida al base el Masnou y algún jugador perderá protagonismo

Una de las primeras decisiones será ceder a Michael Caicedo al no tener sitio en el equipo

La presencia de Rubio en el juego exterior blaugrana restará minutos a algún otro jugador

La presencia de Rubio en el juego exterior blaugrana restará minutos a algún otro jugador / JAVI FERRANDIZ

Ramon Palomar

Ramon Palomar

El regreso oficial de Ricky Rubio con la camiseta del Barça todavía está lejos, posiblemente el 1 de marzo ante el AS Mónaco en el Palau, correspondiente a la jornada 27 de la Euroliga.

Aunque todavía faltan algunos días para ese momento, el técnico azulgrana, Roger Grimau, ya se encuentra haciendo cábalas de cómo encajar a Ricky en el juego exterior blaugrana que ya cuenta con tres jugadores de alto nivel.

La presencia del base del Masnou y el beneficio que aportará al conjunto azulgrana es incuestionable, aunque presenta un problema para el técnico porque alguno de los tres exteriores, Tomas Satoransky, Nico Laprovittola, o Rokas Jokubaitis, tendrán que reducir sus minutos de juego.

Jokubaitis, ¿el damnificado?

Y en esa situación, aunque sea en beneficio del grupo, uno de ellos perderá protagonismo, y visto el rendimiento de todos ellos, el que posiblemente quede relegado a la cuarta opción sean el lituano Rokas Jokubaitis.

La otra opción de Grimau es repartir los minutos con Satoransky, el base más puro junto a Ricky, mientras que Laprovittola no parece que vaya a perder galones después de su espectacular primera parte de la temporada.

Jokubaitis podría perder protagonismo en favor de Ricky Rubio

Jokubaitis podría perder protagonismo en favor de Ricky Rubio / FCB

La primera ‘victima’ del fichaje de Ricky será el joven Michael Caicedo, que se queda sin plaza en el equipo y el club ha decidido cederlo hasta final de temporada al Bàsquet Girona, como avanzaba Marc Mundet en ‘Jijantes’. Una buena solución para que tenga minutos ya que resultaría imposible encontrarle espacio entre los exteriores y necesita jugar para desarrollar su juego.

Veremos cómo consigue tener a sus jugadores contentos, algo que ha gestionado muy bien hasta el momento Grimau, aunque la llegada de un jugador diferencial, seguro que obligará a tomar decisiones que no dejarán a más de uno contento.