Las claves del Barça para el quinto partido ante Olympiacos

Borrón y cuenta nueva. No hay tiempo para lamentarse. Así tiene que encarar el Barça de Grimau el quinto y definitivo partido de la serie del play-off de Euroliga ante Olympiacos tras el descalabro del pasado jueves, un encuentro en el que los griegos sacaron a pasear las vergüenzas de su rival en pista, con un resultado final de 92-58.

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Fue más que una derrota dolorosa para los azulgranas, que volvían al Pireo tras remontar la serie (2-1) en un épico tercer choque que se decidió en el último segundo de la prórroga e insufló de ilusión a los aficionados culers, que vieron la mejor versión de su equipo en cancha. Dos días después, la peor.

Ahora todo pasa por el Palau Blaugrana, feudo que dictará sentencia sobre Barça y Olympiacos, con un billete para la próxima Final Four de Berlín en juego

El factor mental, clave

El cuadro de Roger Grimau se ha caracterizado esta temporada por ser un equipo capaz de lo mejor y, a veces, de lo peor. Un proyecto nuevo como este Barça necesita cimentar unas bases para soñar en grande, pero la irregularidad anotadora y las desconexiones mentales en momentos clave preocupan, asignatura obligatoria a mejorar el miércoles en el Palau.

Tras la conclusión de los primeros diez minutos del 4^o partido, el Barça se imponía por 21-23 con una sólida actuación en ambos lados de la pista; a partir de ahí Olympiacos dejó sin ideas a los catalanes y cerró la primera parte con una remontada antológica para el 53-37. Los catalanes encajaron un parcial de 17-0 en la apertura del segundo acto y bajaron los brazos demasiado rápido, impropio de una plantilla que aspira a meterse entre los cuatro mejores equipos del continente.

La respuesta del Barça tendrá que ser contundente ante un Georgios Bartzokas que es un gran estratega y conoce muy bien las debilidades de su rival.

Obligados a afinar puntería

El acierto desde la larga distancia ya era una de las claves antes de empezar esta eliminatoria de play-off. Durante la temporada regular, el Barça ha sido uno de los equipos más dependientes - o el que más - de su porcentaje de 3 para asegurar las victorias, mientras que las derrotas, en muchas ocasiones, venían marcadas por el desacierto en esta faceta.

La serie ante Olympiacos no ha hecho más que evidenciar esta problemática. En las dos victorias cosechadas, el Barça ha promediado un excelente 45,6% en la estadística, con la aparición de jugadores como Abrines o Jabari Parker siendo clave para Grimau. En el otro lado de la moneda, los azulgranas promediaron un 27,25% en porcentaje de triples en las dos derrotas, resultando en una caída de casi un veinte por ciento.

Por contra, pese a que los griegos firmaron un 12/24 en el cuarto partido, parecen tener más recursos a los que agarrarse cuando las cosas no van bien, un estilo diferente al que plantea el Barça, que está obligado a afinar puntería a partir de ya. Los especialistas en el triple deben aparecer y Grimau tendrá que acudir a la pizarra para encontrar a sus jugadores en situaciones de tiro cómodas.

El Palau no fallará

En estos momentos de vida o muerte, los intangibles también pueden acabar siendo un factor determinante, y es aquí donde el Palau entra en acción como gran protagonista. En liga regular, el Barça tan solo perdió 2 partidos en casa de 17 encuentros disputados (Olimpia Milan y Monaco) en la Euroliga, unos datos a los que acogerse para confiar en la victoria de cara al miércoles.

Con el Palau Blaugrana de las grandes citas, Olympiacos consiguió robar el 'factor pista' en el primer choque de la serie, pero la parroquia culé supo aupar a los suyos en el segundo y los llevó en volandas hacia la victoria, una olla a presión que volverá a estar presente para este 5^o partido y que ya fue clave en los play-off de 2022 ante Bayern de Múnich.