El sorprendente regalo a Luka Doncic

La pequeña, de Cantabria, fue a ver a Luka en el WiZink Center en el duelo de los Dallas Mavericks contra el Real Madrid y tuvo su recompensa

"Vino una persona y al final del partido se lo recordó, se quitó las zapatillas y nos las dio. Fue todo un detalle, muy importante", dice el padre

Luka Doncic, al lado de la niña a a la que regaló los zapatos

Luka Doncic, al lado de la niña a a la que regaló los zapatos / @NBAspain

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Una niña de Vioño de Piélagos que estuvo anoche en el WiZink Center presenciando el Real Madrid-Dallas Mavericks ha conseguido quedarse con las zapatillas de Luka Doncic a cambio de unos sobaos. Uno de los mejores jugadores de la NBA tuvo un gran detalle con un aficionado en las gradas. Así lo ven en la casa de apuestas.

Esta niña juega en la categoría Infantil del Pas Piélagos y es una gran aficionada al baloncesto, según cuenta a EFE su padre. Acudieron a Madrid a ver este partido con dos entradas que le regaló por su cumpleaños su hermana mayor, con el dinero ahorrado tras trabajar en el verano, y que fueron para ella y el padre.

Padre e hija habían hablado días antes, y en el mismo viaje a Madrid, de que esta niña quería hacer una pancarta para Doncic, al que admira mucho. "Cuando íbamos ya a Madrid paramos a comprar unos sobaos en un sitio que solemos parar siempre y se nos ocurrió comprarlos y poner en la pancarta: te cambio las zapatillas por unos sobaos", señala.

Llegaron al WiZink Center "muy pronto" e intentaron ver a Doncic al acceder pero no les fue posible, si bien pudieron situarse muy cerca de la zona por la que entran y salen a la pista los jugadores. Doncic vio la pancarta al saltar a pista, se acercó, le firmó la camiseta a la niña y prometió darle sus zapatillas a cambio de los sobaos al final del partido. Y así fue, como puede verse en un vídeo que circula por las redes sociales.

"Vino una persona y al final del partido se lo recordó, se quitó las zapatillas y nos las dio. Fue todo un detalle, muy importante", dice el padre, que asegura que su hija está "como loca" y "no suelta las playeras para nada". "Quiere meterlas en una urna", bromea.

Y añade que su hija lo tenía claro: "ella solo quería el autógrafo de Doncic, es muy de ese jugador. Los demás le importaban un poco menos y se fue para casa muy feliz", apostilla.