Las primeras palabras del abogado de la familia Arrieta tras conocer la sentencia de Daniel Sancho

Daniel Sancho Bronchalo asesinó y descuartizó a Edwin Arrieta Arteaga el pasado 4 de agosto de 2023. Este jueves 29 de agosto, el chef ha sido condenado a cadena perpetua, además, deberá pagar una indemnización de 4 millones de bahts (unos 105 mil euros).

El juicio del hijo del actor Rodolfo Sancho empezó el pasado 9 de abril y se alargó hasta el 2 de mayo. El joven ha sido acusado de tres delitos: asesinato premeditado, ocultación del cuerpo y destrucción del pasaporte de Edwin Arrieta. De estos tres, el joven de 30 años admitió el segundo, la ocultación del cadáver de Arrieta, el cual desmembró e hizo desaparecer por varios lugares de la isla de Phangan.

Daniel Sancho, condenado a cadena perpetua por el asesinato de Edwin Arrieta

Sin embargo, la causa judicial no acaba aquí. Contra esta sentencia caben recursos frente al Tribunal de Apelaciones primero y el Tribunal Supremo después. Por lo tanto, el proceso podría alargarse entre uno y tres años si el asunto finalmente llega al Supremo.

Tras conocerse la sentencia, Juango Ospina, abogado de la familia de Edwin Arrieta ha asegurado a 'Lecturas' que está contento con la decisión del tribunal: "Mis sentimientos son de satisfacción procesal. Estoy muy satisfecho por el trabajo realizado. Ha sido un juicio muy complejo, con mucha tensión en los últimos días".

"Nos mostramos muy satisfechos con la sentencia como juristas, y la familia Arrieta siguen sumidos en el dolor, pero agradecen al tribunal esta decisión a la espera de conocer la motivación el fallo", ha declarado el letrado.

Ospina ha explicado que la hermana de Edwin ha agradecido el apoyo en medio de la presión mediática: "Darlin quiere agradecer a los medios que han empatizado con su sufrimiento por el trato que han recibido de los mismos en unos meses muy complicado".

El abogado ha declarado que finalmente ha dominado sus tesis: "En nuestro caso, considerábamos que había un asesinato con premeditación, pero eran ellos los que tenían la última palabra y teníamos que acreditarlo y han prevalecido nuestras tesis. No entramos en valoraciones jurídicas, pero las líneas de defensa han aumentado el dolor de la familia. Hubiera sido más fácil haber pedido perdón y no esta confrontación de teorías que lo único que han hecho es abrir una herida que la familia es incapaz de cerrar".