Miriam Blasco, el primer oro femenino español

Suele decirse que más vale tarde que nunca. Y es que no fue hasta 1992, en una edición de los Juegos Olímpicos más que recordada por toda España, cuando una mujer española alzó una medalla de oro desde lo más alto del podio. Una mujer que competía en judo, conocida como Miriam Blasco.

La selección española pone rumbo a los Juegos Olímpicos

Hace 32 años, Miriam tumbó en la final de judo a su oponente Nicola Fairbrother, concretamente el 31 de julio de 1992 en el Palau Blaugrana. Una rival con la que volvería a encontrarse, esta vez para afrontar la vida juntas como pareja. Cuando se casaron, a Blasco le tocó el anillo de plata y a Fairbrother el de oro. Para compensar.

Antes de conseguir la medalla en Barcelona, Miriam ya venía de ganar varios campeonatos y consolidarse como una gran yudoca: campeona del mundo en 56 kilos en 1991, subcampeona en 1989, campeona de Europa en 1991 y campeona de España en 1988.

Seis meses antes del éxito de Miriam Blasco, Blanca Fernández Ochoa había logrado convertirse en la gran pionera de los Juegos Olímpicos de Invierno, ganando la medalla de bronce en la disciplina de slalom. 1992 iba a convertirse en un gran año para el deporte femenino con la primera medalla también en los de Verano.

Un reto dentro y fuera del tatami

Miriam tuvo que ser fuerte más allá del tatami. La yudoca perdió a su marido en un accidente de tráfico una semana antes de los Juegos Olímpicos. El Palau Blaugrana coreó su nombre y el de Sergio mientras la española tenía en el suelo a su rival. Segundos después, el combate se acabó y ella estalló en lágrimas.

Blasco es historia del deporte español, aunque ella no se lo creyó hasta unos años después. "Me di cuenta de que mi oro olímpico era histórico cuando vi que era una pregunta del Trivial". Una pregunta que podría estar tanto en la categoría de deportes como en la de historia.