Con cuestas, con un calor sofocante. La prueba del maratón femenino ha sido todo un espectáculo para abrir boca en el Europeo de Munich. Arrancaba a las 10:30 de la mañana. Demasiado tarde, seguramente (el masculino a las 11:30, aún peor). Con Marta Galimany, con Irene Pelayo (la española más veterana de la historia en correr un maratón europeo), con Laura Méndez y con Elena Loyo. Y con varias corredoras importante. La neerlandes Brinkman era la que mejor marca traía con diferencia de las participantes (2:22:51) a pesar de haber corrido solo dos maratones en su vida. Pero con el calor y la competición esos registros quedan en un segundo plano.
La prueba ha sido muy dura. Y lenta. No era para menos por la temperatura y por un circuito con varios repechos importantes. En el grupo de cabeza final estaban la polaca Lisowska, la germana Dattke, la neerlandesa Brinkman y la croata Parlov, que ha hecho un final de carrera espectacular para terminar en segunda posición con un registro de 2:28:42. La ganadora, tras un ataque largo a falta de unos 4-5 kilómetros, ha sido la polaca Lisowksa (2:28:36). Ha cogido un colchón muy valioso y no lo ha dejado escapar.
Pelayo, 16ª a los 42
La tercera plaza se la han disputado la neerlandesa Brinkman y la germana Dattke en un sprint final en el que se las veía sufrir mucho. No era para menos. Finalmente cerraba el podio la de Países Bajos. Pendientes de las medallas por equipos, finalmente España se llevaba una plata de mucho valor gracias a la 11ª plaza de Galimany (2:31:14), a la 16ª de Irene Pelayo (2:33:15) y Elena Loyo 18ª con 2:34:56. El oro, para Alemania.
