Hay muchos tipos de pruebas y exámenes físicos para detectar distintas dolencias y afectaciones musculares y hoy hablamos de una que tiene que ver con el acortamiento del psoas ilíaco: el test de Thomas.
Llamamos test de Thomas a la prueba de examen físico bautizada así por su creador, el Dr. Hugh Owen Thomas, profesional de la cirugía ortopédica de origen británico. La prueba consiste en la elevación de una pierna para descartar una contractura de flexión de cadera o un acortamiento del psoas.
Esta prueba también se conoce bajo el nombre de test de acortamiento del psoas o prueba de acortamiento del psoas ilíaco.
Se trata de una patología muy común entre corredores y deportistas, pero también entre el sector de población sedentaria. Son las dos caras de la moneda: gente que realiza mucho deporte y gente que permanece mucho tiempo sentada.
El psoas o músculo iliopsoas o psoas ilíaco es un músculo profundo que se encuentra localizado en la parte superior de la pierna, conectando tren inferior con el tronco. Es el encargado, junto al glúteo, de, movimiento de flexión de cadera y también de la flexión del tronco.
Cuando se produce un acortamiento del psoas significa una menor longitud del músculo y una menor fuerza en la zona, lo que puede derivar en dificultades para realizar determinados movimientos y ejercicios asociados con la flexión de tronco, como los abdominales.
El síntoma principal que percibirás es la hiperlordosis y lumbalgia, que podrían hacerte pensar que sufres algún tipo de lesión en la columna lumbar cuando lo que realmente está sucediendo es que tienes un acortamiento de psoas.
Además, debido al acortamiento, puede producirse inflamación en el tendón y el consiguiente dolor. Cuando esto sucede hablamos de tendinitis del psoas ilíaco.
El acortamiento de psoas, el acortamiento de cuádriceps, o padecer ambos a la vez, no son un problema especialmente grave.
Básicamente, la consecuencia directa de este tipo de acortamientos musculares es que la columna lumbar será la encargada de soportar una mayor carga y tensión de la que debería y esto se debe a la falta de movimiento y flexibilidad de la cadera.
Esto, a su vez, conlleva a la aparición de dolores y a la incapacidad para realizar ciertos ejercicios.
El tratamiento para mejorar esta movilidad y dejar de padecer las consecuencias de un acortamiento de psoas es la realización de estiramientos y ejercicios especializados para el trabajo de esa zona (cadera y cuádriceps)
Tumbado boca arriba en la camilla del fisioterapeuta, que es el profesional que se encarga de realizar la prueba de Thomas, y con el glúteo en el borde de la camilla, se debe levantar y flexionar una de las piernas llevándola hasta que toca el abdomen, con el objetivo de eliminar la lordosis lumbar, y sujetándola con las manos. La pelvis debe estar en posición neutra, sin inclinación.
La otra pierna queda colgando y en función del movimiento que se produzca en ella, el resultado de la prueba será uno u otro.
Otra prueba similar al test de Thomas que sirve para valorar si existe un acortamiento de psoas consiste en lo siguiente: colocándote en bipedestación, agarra una de tus rodillas y súbela hacia el pecho. Ahora, en el punto de máxima flexión, suéltala. Debe aguantar por encima de los 90 grados durante 15 segundos para que no exista ningún tipo de acortamiento muscular.
Con las nuevas interpretaciones que han derivado del test de Thomas original se puede hablar también de un recto anterior acortado, de un sartorio acordado o de un tensor de la fascia lata acortado.
Y hasta aquí todo lo que podemos contarte sobre el test de Thomas. Si crees que puedes padecer un acortamiento de psoas o de algún otro músculo de la parte superior de la pierna lo mejor es que realices esta prueba y compruebes lo que dicen los resultados.