La suerte de poder correr

Publicado por
Funes
Publicidad

Uno de los consejos que suelen darse para lograr la felicidad es no dar nada por regalado. Esto requiere pararse a pensar por un momento antes de cada rutina o acción cotidiana en nuestras vidas, y darnos cuenta de que el hecho de que sean cosas que hacemos de forma automática y sin pensar no les resta valor.

Muchas veces, muchas, salgo a correr y saboreo cada paso, cada zancada; siento cómo se contraen mis músculos y cómo soy capaz de poner mi cuerpo en movimiento. Pienso en los momentos en los que no he podido hacerlo por lesión u otras circunstancias, y también pienso aquellos que no pueden hacerlo. Me imagino sin poder correr, y doy gracias al universo por cada paso que me dejan avanzar mis piernas.

Publicidad
Publicidad
Compartir
Publicado por
Funes