Mechaal podría ser uno de los grandes nombres del 10k de Bizia / EFE
(EFE).- Adel Mechaal lleva muchos años siendo una referencia del mediofondo español. En Estambul, donde reside con su mujer, la atleta turca Emine Hatun, espera subirse al podio de los 3.000 metros en el Europeo de pista cubierta, en los que tendrá enfrente al noruego Jakob Ingebrigtsen.
Mechaal (El Jebha, Marruecos; 1990) llegó a España con dos años, a Palamós, y obtuvo la nacionalidad en 2013. Desde entonces ha ido labrando una carrera deportiva jalonada de éxitos. Los más recientes; el triunfo en el Campeonato de España de 3.000 metros en pista cubierta en Madrid y el récord nacional de 1.500 en Birmingham con 3:33.28, batiendo la anterior plusmarca bajo techo que estaba en posesión de Andrés Díaz desde 1999.
P: ¿Cómo llega a este Europeo?
R: Los números hablan por sí solos. Estoy en mi mejor estado de forma, no en vano he batido dos veces mi mejor marca personal, en Gallur y en Birmingham, y la preparación que he hecho con mi entrenador Antonio Serrano ha sido para el 3.000, así que estoy un poco mejor que cuando batí ese récord de Europa del año pasado.
P: El récord de España de 1.500 en pista cubierta de Andrés Díaz le ha costado un año batirlo desde que se lo planteó
R: El año pasado ya dije que me hubiese gustado, pero en Birmingham la pista era muy vieja, no era la mejor para batir un récord. Este año la pista era nueva, la Federación Británica se ha gastado mucho dinero para remodelarla y se ha estrenado con tres récords, el local, el irlandés y el español. Se dio la carrera perfecta y estoy muy contento. Esta competición me da muchas esperanzas de llegar a Estambul con el mejor estado de forma.
P: En Estambul tendrá enfrente a Jakob Ingebrigtsen. El otro día dijo Mohamed Katir que su objetivo en verano era intentar ganarlo. ¿Se le puede ganar en Estambul?
R: Lo que piensa Katir lo pensamos todos. Es cierto que Jakob está en un estado de forma increíble. Ha estado enfermo y ojalá llegue mermado. Es el atleta a batir. Es como Mo Farah o Hicham El Guerrouj en su día. Todos los atletas entrenamos con el punto de mira suyo. Tiene una diana en la espalda y todos queremos pasarle. Voy a intentar que Neil Gourley le canse lo máximo posible y veremos si llega cansado, porque además va a doblar distancia. El 3.000 es la última prueba, voy a por todas y no me voy a arrugar ante él.
P: Hace dos años, Katir era casi un desconocido. ¿Qué ha supuesto su irrupción para el resto de atletas?
R: Un aliciente. Desde 2015 hasta que han llegado Katir y Mario García Romo quizá me he sentido un poco superior a nivel español y eso te hace relajarte. He logrado cinco dobletes. Ellos dos han explosionado el atletismo español de mediofondo y nos han empujado a todos.
En Birmingham, por ejemplo, tenía un objetivo, hacer la mínima para el Mundial de Budapest, y así en verano poder preparar el Campeonato de España a tope, sin estar preocupado por esa mínima. Ignacio Fontes, Jesús Gómez, Katir, Mario y yo somos cinco atletas y hay tres plazas para el Mundial. Hay que llegar al Campeonato de España en un estado de forma increíble, sin pensar en Budapest, porque si piensas en eso igual te quedas en casa.
P: ¿Se siente cómodo corriendo bajo techo?
R: Sí. La pista cubierta viene después de la transición del cross. Vienes de un volumen muy alto, corriendo distancias de diez kilómetros, y la prueba de 3.000 es mi favorita, es la que mejor se me da. El 5.000 se me queda un poco largo y el 1.500 corto.
En el 3.000, cuando llega la pista cubierta, no es que me transforme, pero sí es una prueba a la que me adapto bien y trato de disfrutarla. El año pasado, en el aire libre, hice una temporada muy buena, pero el covid lo mermó todo. Batí mi mejor marca en el 5.000 en Estocolmo, en la Liga Diamante, y el covid arruinó la preparación.
P: El atletismo no para. Nada más venir de Estambul empezará en breve la temporada de aire libre. ¿Todo está enfocado en el Mundial de Budapest?
R: Para nosotros y la Federación es el objetivo más importante. Luego tenemos la Copa de Europa, el Campeonato del Mundo de ruta, que será muy bonito en Riga, a finales de septiembre, y me encantaría participar. Estos son los tres grandes objetivos de la temporada de verano.
P: Este Europeo es en Turquía, un país que conoce bien. ¿Sigue viviendo en Estambul?
R: Sí. El pueblo turco es muy hospitalario, te abre los brazos y te abraza. Hace cuatro años y medio me moví a Turquía porque mi mujer trabaja en un colegio con niños con Síndrome de Down y discapacidad intelectual y evidentemente ella debía estar allí trabajando y yo podía correr en cualquier lugar. Tomé la decisión de irme a Estambul y la verdad que la gente de allí me ha acogido bien. Actualmente están sufriendo una tragedia muy grande y esperemos que este Europeo de cuatro días les ayude un poco a olvidar esas semanas que todavía siguen para la reconstrucción, que durará meses y quizá años.
P: En redes sociales se mostró consternado por las consecuencias de los terremotos en Turquía, en los que se vieron afectadas muchas personas que conocían.
R: Las diez ciudades más devastadas suman 13 millones de personas. Hay muchos desplazados. El pasado mes de septiembre me casé en Antakya, la ciudad con más muertos y más derrumbes. Después de siete días hubo otros dos terremotos, uno de 6,4 y otro de 5,8. Los familiares de mi mujer todos han perdido las casas.
Nosotros hace seis meses nos casamos allí, tuvimos 245 invitados, de los cuáles seis han muerto y dos han desaparecido. Mi mujer lo ha pasado mal porque primas y amigas han muerto y de su entrenadora, tanto su hermana, padre y dos hijos han fallecido. Para mi mujer no han sido momentos fáciles, para mí tampoco, pero lo bueno es que tenemos la familia directa bien. Están en nuestra casa en Estambul a la espera de que el Gobierno los pueda reubicar para que puedan hacer una vida hasta que se sepa que puede pasar con Antakya. Estoy con ganas de ir a ver la ciudad. Lo haré después del Europeo. Estos últimos años he ido mucho a ver a la familia de mi mujer y es una tragedia y una pena muy grande.