@DiamondLeague (Soňa Maleterova)
El estadio Luis II de Mónaco fue testigo de una noche de atletismo espectacular. Jakob Ingebrigtsen, el prodigioso corredor noruego, estuvo a punto de romper el récord mundial de los 1.500 metros, quedándose a solo 73 centésimas de la marca histórica establecida por Hicham El Guerrouj en 1998. Ingebrigtsen completó la carrera en 3:26.73, demostrando una vez más su dominio en la distancia.
A tan solo tres semanas de defender su título olímpico en los 1.500 metros y buscar también la gloria en los 5.000 metros, Jakob Ingebrigtsen había solicitado una carrera rápida con la intención de superar su propio récord europeo de 3:27.14, establecido en Chorzow en julio del año pasado.
Los tiempos intermedios no fallaron, con el esloveno Rudolf marcando 55.17 segundos en los primeros 400 metros y 1:50.66 en los 800 metros. Pieter Sisk hizo un excelente trabajo al guiar a Jakob hasta casi los 1100 metros momento en el que comenzó a alejarse con uno de sus característicos cambios de ritmo progresivos para finalizar con un tiempo de 3:26.73, quedando a solo 73 centésimas del récord mundial del marroquí Hicham El Guerrouj.
Cheruiyot (3:28.71) y su compatriota Brian Komen (3:28.80) segundo y tercero respectivamente, mientras que Nuguse quedó cuarto con 3:29.13.