Ha adaptado su vida a sus objetivos. Y con un océano de por medio. Hace un año, Nicolás Cuestas tomó la decisión de dejar Montevideo y venir a Madrid para clasificarse para el maratón de los JJOO de París. Vino con todo y a por todo. “El momento era ahora, a los 37 años, porque después no habrá más”, razona sin miedo al resultado. “He hecho lo que tenía que hacer”.
Eduardo Galeano definió a Montevideo como “un campo de fútbol con casas”.
Sí, se respira fútbol por todas partes. ¿A quién no le gustaría ser Luis Suárez? Yo mismo jugaba de número 11. Mi idea era ser futbolista hasta que mi hermano mellizo empezó a correr y me convenció hace 21 años. Desde entonces, correr es mi deporte.
Fue olímpico en el maratón de los JJOO de Río.
Pero también tengo cuatro Mundiales. Así que cuando uno lo piensa en frío me doy cuenta de que yo soy parte de eso. He competido con Mo Farah, con Kipchoge… Hay gente que dice que le gustaría verlos en persona y, para mí, era lo más natural porque he estado en la misma línea de salida que ellos. Luego, cada uno hace su mejor trabajo lo mejor que puede.
Y ahora quiere repetir en París.
Sí, en el maratón. Pero es difícil. Mi idea es ingresar por los puestos de ranking porque la mínima (2h08m10) es muy fuerte. No la descarto, pero esa mínima…. Voy a ver si puedo hacerla en Londres esta primavera. En el último maratón que corrí en Copenhague he hecho 2h11m30. Pero, si voy a Londres, espero estar mejor.
Lo ha entregado todo a esto.
Ahora mismo, sí. Me dedico a entrenar y competir para llegar a los JJOO. Hace un año presenté este proyecto a la Secretaría Nacional de Deportes de mi país, donde trabajo actualmente, y me lo aprobaron. Y entonces decidí venir a España.
A Madrid.
Sí, vivo en Las Tablas, en una urbanización, ideal para la vida familiar. Yo he venido aquí con mi familia y mis dos hijos. Tenía que pensar en ellos y en lo mejor para ellos.
¿Y su familia está de acuerdo?
Pero esta es la apuesta que he hecho con ellos para llegar a los JJOO de París. ¿Lo conseguiré o no? Ya se verá. Pero, claro, no ha sido fácil dejar mi país, mis costumbres, mi familia. He hipotecado mi vida por los JJOO. Pero el momento era ahora con 37 años. A los 40, puedo iniciar una carrera universitaria, pero ya sería tarde para intentar ser olímpico.
¿Y no fue suficiente con serlo en Río 2016?
Bueno, pero es que me quedé tan cerca de ir a Tokio. La marca era 2h11m30 y yo hice 2h11m42.
Ahora, tiene 37 años.
Acabo de cumplirlos el 8 de diciembre. No soy un chico joven. Soy de la cosecha del 86, pero todavía me queda un rato. La meta insisto en que es volver a los JJOO. Es el objetivo con el que me levanto cada mañana.
¿Y cómo se entrena a los 37 años?
Es muy difícil. La recuperación cuesta mucho más trabajo. Sí hay trabajos fáciles como los ritmos sostenidos. Pero la velocidad cuesta más. Por suerte, llevo 20 años de alto rendimiento y es lo que me permite conocerme y adaptar mis entrenos. Le diría que mi trabajo, sobre todo, es evitar lesiones.
¿Y machaca mucho?
Ahora, no. Hago seis días casi todos en dos turnos. Pero es una carga baja de 130 o, a lo sumo, 150 kilómetros. Cuando sea la época del maratón llegaré hasta 240.
Y eso sí es machacar.
Pero, ¿sabe lo que pasa entonces?, las semanas que haces 180 parece que no entrenaste. Cuando sumas dos semanas de 200 ya te acostumbras y el cuerpo se siente cómodo y, si le sacas de ahí, es como si le sacases de su zona de confort.
Acaba de ganar la San Silvestre Vallecana Popular.
Es duro correr contra uno mismo. Cuando tienes un nivel, correr solo se hace difícil. Pero ahora estoy bien. Me sentí a gusto. Sobre todo porque todavía me queda por subir. Tengo el 10k de Valencia el 14 de enero y luego el medio maratón de Santa Pola para mejorar marca. Es lo que diferencia a España de Uruguay. Aquí hay carreras de mucho nivel.
Hay que seguir insistiendo entonces.
Es lo que me permite estar en España. Es un país que conocía. Tengo dos amigos ex atletas, Antonio Silio y Ricardo Vera, que viven en Guadalajara desde hace treinta años. De hecho, yo ya venía a menudo a competir a España. Siempre que había un Mundial en Europa venía a entrenar aquí. Así que decidí que, de cara a los JJOO, este era el mejor sitio para intentarlo..