Uno de los momentos más apasionantes cuando salimos a hacer ‘trail running’ es el del descenso. El placer de bajar pendientes del 20 o el 30% es una descarga de adrenalina difícil de igualar con otras actividades. Además, todo lo que sube baja y mientras estás sufriendo subiendo una cuesta durísima acostumbras a sacar fuerzas pensando, soñando, babeando con ese momento en el que la subida se acabará y tendrás por delante una bajada preciosa, en la que habrá que estar lúcido para no caer, pero en la que esa mezcla de técnica y velocidad se conjuntarán para disfrutar de un momento único para el ‘trail runner’.
Salomon ha confeccionado un vídeo increíble de un descenso de dos corredores que tienen que bajar por una pendiente de órdago y estar no solo pendientes de las piedras y los desniveles que ofrece el terreno, sino también de no chocar con unas simpáticas aldeanas que hacen su vida rutinaria mientras ellos ‘vuelan’ por el árido terreno.