Imagen de archivo del Union Home Cleveland Marathon
Varios de los ‘finishers’ del Maratón de Cleveland alzaron la voz, indignados, tras cruzar la línea de meta. “He visto muchos circuitos malos, pero este se lleva la palma. Qué asco”. “Parecía como si un niño de cuatro años dibujara líneas al azar en las calles”. Estos eran algunos de los comentarios. No era para menos, puesto que venían de realizar la friolera de 65 curvas a lo largo de los 42,195 kilómetros de recorrido de la prueba en la ciudad estadounidense.
Normalmente los organizadores de los maratones intentan realizar circuitos con el menor número posible de curvas para facilitar de alguna forma una prueba ya muy dura de por si y desgastadora. Pero en esta ocasión, por culpa de una obra faraónica en medio del circuito habitual del Maratón de Cleveland (ojo porque en 2019 tuvo ya 42 curvas, que no es precisamente poco), se vieron ‘obligados’, al no poder trasladar el circuito a otra parte de la ciudad, a realizar muchos más virajes para poder pasar por calles circulables.
El Union Home Mortgage Cleveland Marathon, clasificatorio para el Maratón de Boston, se ganó en la prueba masculina con un tiempo más que discreto de 2:19:56 por parte del corredor norteamericano Will Loevner. Ashton Swinford , de Hudson, Ohio, ganó el maratón femenino por segundo año consecutivo en 2:47:37. 1232 atletas (valientes) corrieron el maratón, que espera volver a su recorrido habitual el próximo año.